Luces, cámara y acción. Comienza el espectáculo de la ACB y lo hace con un Unicaja de Málaga motivado y remozado. Es un año en el que el club de Los Guindos quiere recuperar el estatus perdido en la competición nacional después de deambular demasiado tiempo por desierto deportivo. Y lo hace con sólo cuatro caras nuevas en la plantilla, pero con un halo de optimismo que ha sacudido al club con la llegada de la nueva directiva. A eso se agarra Fotis Katsikaris y también un Carpena ávido de volver a rugir con lo suyos.
Después de una pretemporada con buenos resultados y mejores sensaciones de la plantilla e incluso de algunos jugadores que estaban en el ocaso deportivo, Unicaja afronta este domingo a partir de las 20:00 en el Martín Carpena su primer compromiso liguero, que será ante el Mombus Obradoiro. La obligación de este equipo debe ser competir y el resto debe llegar porque hay un puñado de buenos jugadores en la plantilla.
Unicaja ha demostrado que puede competir contra los mejores, como hizo ganando al Real Madrid en el Trofeo Costa del Sol. Pero también que si no compite puede perder contra cualquiera.
Las caras nuevas, sin embargo, han dejado buenas actuaciones con alguna duda. Uno de los mejores del verano ha sido Michael Eric. El pívot nigeriano asombró en los primeros partidos, fruto también de la conexión con él en la pintura. Jonathan Barreiro es otra incorporación. El gallego, pese a que no está jugando en su posición natural de alero, ha mostrado compromiso y trabajo. Y más dudas hay con una de las grandes apuestas, como es Norris Cole. El base norteamericano se ha mostrado errático en el tiro y tampoco es un base puro.
Sin embargo, el último en entrar en el roster cajista es Edgar Vicedo, para que sean cuatro las caras nuevas del curso. El alero madrileño ha completado la pretemporada a las órdenes de Katsikaris y ha firmado un contrato con Unicaja por un mes. La lesión de Carlos Suárez, que no termina de arrancar, ha obligado al club a mover ficha.
Los que siguen, además de Katsikaris en el banquillo, son Alberto Díaz y Jaime Fernández de bases, Francis Alonso y Darío Brizuela de escoltas, Axel Bouteille de alero, Tim Abromaitis y Carlos Suárez de ala-pívot, y Rubén Guerrero y Yannick Nzosa en el puesto de pívot. Sin embargo, no se espera que sean de la partida ni Brizuela ni Suárez, ambos por lesión y a los que no se les quiere forzar.
Katsikaris, contento
Este viernes habló en la previa del inicio liguero el entrenador cajista, Fotis Katsikaris, que afronta su segunda temporada después de que cogiera el equipo a mitad del curso pasado. "Estoy con mucha ilusión, con muchas ganas de jugar la liga. Va a ser un curso muy competitivo, todos los equipos han fichado bien, espero la Liga Endesa más fuerte que los últimos años. Ya estamos con mucha ilusión", especificó el coach.
"Hemos hecho una pretemporada muy buena, y si no hubiéramos tenido las lesiones de Rafa Pozo y Darío Brizuela hubiera sido perfecta en casi todos los sentidos por la implicación de la gente, los nuevos fichajes, hemos trabajado muy bien en equipo, con buena disciplina, los del año pasado vienen con muchas ganas… Estoy muy contento con la pretemporada", continuó el griego.
Fotis abordó uno de las cuestiones claves para el equipo, la implicación. "Estoy contento en general y me gusta mucho la actitud y mentalidad del equipo, en el aspecto defensivo y creo que con el tiempo vamos a tener un equipo que va a defender con mucha solidez", dijo.
Y otro factor diferencial será volver a ver a la afición en la grada. Ahí Unicaja sale ganando. "Con mucha alegría, por fin vamos a tener nuestro público con nosotros. Creo que con el apoyo de nuestro público, que es uno que siempre aprieta. Cuando el equipo no juega bien, lo despierta. Es algo que al jugador le ayuda, pero esperamos el apoyo de nuestro público, ellos también tienen muchas ganas de volver al Carpena y apoyar", sentenció el entrenador de Unicaja.