"¡Qué partidazo!"; "esto es de Euroliga...", era lo que se escuchaba en la tribuna de prensa durante el último cuarto de la exhibición que estaban dejando sobre la pista del Martín Carpena Unicaja de Málaga y Baskonia. Fue un duelo de titanes que dominó el equipo vitoriano en los tres primeros cuartos y el Unicaja se llevó el gato al agua en la última manga (95-91), con más gasolina y con los argumentos que lo han aupado hasta el liderato de la ACB. 

Baskonia se plantó con todas las de la ley en Málaga tras una semana frenética de Euroliga y antes de los cuartos de final de la máxima competición europea contra el Real Madrid cerrándole todos los caminos al Unicaja y con una inspiración fuera de lo normal desde el triple (al final se quedó en 16 de 31), desde donde castigó al equipo de Ibon Navarro hasta que le duró la gasolina. Cualquier otro equipo hubiera entregado la cuchara ante el acierto vitoriano, pero este Unicaja es irreductible. Con Belgrado en el horizonte y la conquista de un título más que factible durante el próximo fin de semana, el cuadro cajista se puso el mono de trabajo para darle la vuelta firmar el mejor partido del curso, demostrando que está preparado para todo. Carter (19 puntos), Kravish (17) y Osetkowski (16) fueorn los hombres más inspirados de la orquesta construida por Ibon Navarro que tuvo en Melvin Ejim el solista que dio las notas más importantes, la de más calidad. 

El duelo empezó con dominio vitoriano en el amrcado. Con Sedekerskis metiéndolo todo y con Carter amortiguando en el otro lado, pero siempre mandando el equipo de Ivanovic. Pero cuando Baskonia osó ponerse gallito (14-21), Unicaja respondió a base de raza en ataque y en defensa. Barreiro y Osetkowski lo igularon y Djedovic terminó de darle la vuelta para la primera ventaja cajista (23-21). Pero ahí seguía Sedekerskis dale que te pego desde el triple. Howard, máximo anotador de la ACB acababa de entrar en la pista a falta de algo más de dos minutos. Se cargó pronto con dos faltas. Luego hubo pitada para entrada de Dani Díez. Costello (24 puntos) se encargó de estirar de nuevo el marcador para Baskonia, que se fue 27-35 al final del primer cuarto. Fue Dani Díez el que le puso el sello a los primeros diez minutos desde el triple sobre la bocina. Lo siguiente fue una petición de mano a pie de pista y retransmitida en directo por le vídeomarcador. 

El segundo cuarto empezó con una batalla para cada canasta. Unicaja se acercó a un 33-37 disuadido por Costello con un triple (15 puntos en ese momento). Con 37-42 a Ivanovic no lo gustaba lo que veía sobre la pista. Pero al Unicaja le costaba echarle el guante a Baskonia, que el martes tiene una cita contra el Real Madrid en los cuartos de final de la Euroliga. El partido estaba en unos niveles muy elevados, pero con Baskonia inspiradísimo desde el triple a falta de tres para el descanso (11 de 17 por 3 de 10 para el Unicaja). Se fueron los vascos de nueve (43-52), intratables también en defensa en este segundo cuarto. Con 48-54 y un Baskonia muy fiable se llegó al descanso. Tenía que intentar darle la vuelta Ibon Navarro desde la pizarra y los jugadores del Unicaja desde la línea de tres. 

David Kravish durante el Unicaja vs. Baskonia Coral Serra

La segunda mitad empezó como acabó la primera, con Baskonia afinado desde el triple. El choque seguía siendo de altos vuelos, como el de Osetkowski al recoger su propio rebote desde el triple y colgarse en el aro. Pero no daba tregua Baskonia. Encontraba todas las rendijas en la defensa cajista. A todo esto, con la bala de Howard reservada. Pero estaba pagando Baskonia a Unicaja con su propia medicina, una defensa inquebrantable para lo de Ibon Navarro. Cada canasta conseguida era una batalla librada. Un mate y un tapón de Costello seguidos de un triple de Rogkavopoulos llevaron la ventaja visitante a +11 (60-71) a falta de 2:25 para el final del tercer cuarto. Estaba poniéndolo todo Baskonia sobre la pista. El Unicaja era un equipo impotente ante el pontencial vitoriano. Mucha madera. El último cuarto murió con un palmeo de Kravish que acercaba al Unicaja antes de la batalla final (66-71).

Un triple de Djedovic, las manos arribas de Ibon Navarro y un robo cajista eran la antesala de la igualada. La firmó Kravish aplastando el aro para el 71 iguales. Bufandas al viento. Lo decía Ibon durante la semana en 101TV este equipo siempre llega. Ahí estaba, a la hora de la verdad. Después del tiempo muerto Kravish metió el 2+1 y Unicaja estaba por delante. Una antideportiva a Kameron Taylor la aprovechó Unicaja para dejar la máxima en el marcador a su favor tras canasta de Kalinoski (79-73). El +6 era la renta en la que más se había movido Baskonia. Ahora era al revés. Ejim puso el +8. Defendía Unicaja ahora como lo había hecho antes el equipo de Ivanovic. Pero quedaba un mundo. Una antideportiva a Kalinoski y una técnica a Howard frenaron el ritmo vertiginoso del duelo y Unicaja mantenía la renta (83-77). Un rebote ganado con sangre enloqueció a Ibon que alentaba a la grada. Estaba siendo el mejor partido del año.

Un lance del Unicaja vs. Baskonia. Coral Serra

Ahora el desgaste del duelo a vida o muerte del Baskonia en Euroliga estaba haciendo mella. Iba con lo justo. En paralelo, a Unicaja se le hizo inmenso el aro desde el triple. Carter y Ejim -qué partido del canadiense- elevaron la renta a +9 (91-82). Aunque ahora sí era Howard el que sostenía a los suyos (acabó con 15 puntos en 16 minutos). Empezó a enchufar canastas para impedir un despegue definitivo del equipo malagueño. Ivanovic había puesto todos los huevos en el cesto del de Nueva Jersey en el último minuto, con Unicaja cinco arriba (93-88). El americano metió los tres tiros libres por falta del Alberto Díaz y y el duelo se apretó 93-91 a falta de 29,5. Una falta rápida y un tiro anotado de Carter dejó la última carta en las manos de Howard, que se la jugó desde muy lejos y el aro escupió la pelota. 95-91 para el un irreductible Unicaja en un canto al baloncesto que mantiene líder al equipo malagueño con las maletas hechas destino Belgrado en busca de la gloria.