Málaga es conocida por sus playas, su gastronomía y sus gentes, pero también esconde en sus municipios, tanto costeros como del interior, algún que otro monumento que llama la atención de numerosos viajeros. Desde hace unos años, los peatones, ciclistas y conductores que pasan por al N-340 dirección Almería justo entre El Morche y Lagos encuentran una fortaleza levantada al filo de un acantadilado.
Castillo del Búho se lee en la fachada de esta edificación que se trata de una pequeña gran fortaleza hecha con rocas de la playa y situada al filo de un acantilado que se encuentra entre El Morche y Lagos, muy cerca de Torrox.
El mini castillo es obra de un artista danés que vive en El Morche llamado Anton Jensen. Sin preverlo, la cosntrucción se ha ido convirtiendo en un foco de atención para todos los que llegan a la Costa de Sol.
Muchos de ellos incluso deciden hacer parada en esta fortaleza para verlas de cerca, ya sea porque se la encuentran de casualidad o porque deciden acercarse. Por lo que la ubicación se ha convertido en un espacio habitual para los selfies y las fotos. Además, los viajeros también pueden obervar todo el litoral oriental de Málaga.
En este punto, cabe señalar que más de una persona ha llegado hasta la zona y se ha sorprendido al observar el castillo. ¿Los motivos? Que en las imágenes que habían visto la fortaleza parecía más grande.
Entre ellos está Diego González, un 'tiktokter' que durante sus vacaciones por la Costa del Sol decidió acercarse al 'Castillo del Búho'. "Paseábamos por la costa del sur de España y vimos un castillo al lado del mar, vamos a verlo", expone en un vídeo publicado en redes sociales.
Su sorpresa llegó cuando en su ruta por el litoral malagueño a ver el Castillo de Búho observó que ni el búho entraba dentro del castillo.