¿Qué hacen un danés, cuatro belgas, dos marroquíes, un rumano y 20 británicos en un minúsculo pueblo de la provincia de Málaga? Por más que el enunciado de la pregunta pueda sonar a chiste, tiene toda la lógica del mundo cuando se analizan los datos de población del menos habitado de los pueblos malagueños.
Un privilegio que corresponde a Salares, núcleo localizado en la comarca de la Axarquía y emplazado en la atractiva ruta mudéjar. Al blanco de la cal que lucen las fachadas de sus casas, marca tradicional de la zona, se une el atractivo de estar situado en el parque natural Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama.
Y aunque apenas le separan 68 kilómetros de la capital de la Costa del Sol, el tiempo de trayecto para llegar por carretera se acerca a las 2 horas. A ello contribuyen unas carreteras propias de montaña.
Las últimas cifras publicadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) concluyen que a 1 de enero de 2023 había censados en este municipio apenas 192 vecinos. Para tomar conciencia de lo reducido de este número sirva decir que apenas representan el 0,7% de la capacidad total del estadio de La Rosaleda.
Lo llamativo del caso es que ha habido años en los eran incluso menos los habitantes. En el último ejercicio son 6 los nuevos residentes llegados al pueblo. El análisis de la estadística permite incluso conocer la nacionalidad de los salareños.
De todos ellos, 164 son españoles de nacimiento. Y a partir de aquí podemos encontrar a un ciudadano danés, a dos nacidos en Marruecos, a un rumano, a cuatro belgas y a 20 procedentes de Reino Unido. Son todas las nacionalidades recogidas en el censo municipal de una localidad que, como otras muchas de su entorno, tiene origen morisco.
Ruta Mudéjar
El entramado de sus calles, la arquitectura de sus casas encaladas formando rincones pintorescos e inolvidables les confiere una seña de identidad única hasta tal punto que forman lo que se conoce como la Ruta del Mudéjar. De su conjunto urbano destaca la Torre Alminar de su Iglesia, declarada Monumento Histórico-Artístico.
Salares fue un asentamiento romano que había conocido la presencia de fenicios, griegos y cartagineses, según se destaca en la información recopilada por la Junta de Andalucía. En la misma se precisa que al periodo romano se atribuye el puente sobre el río Salares que, a la salida del pueblo, se conserva en perfecto estado y aún se usa
De la época de dominación musulmana conserva su trazado urbanístico con muy pocas alteraciones. La iglesia conserva como campanario el alminar de la antigua mezquita, con paños de sebka y azulejos, así como algunos pilares descubiertos durante su restauración.