119.875 personas paradas en Málaga en el mes de junio. Es un volumen grande, pero llama la atención porque es la primera vez que se consigue bajar de la barrera de los 120.000 desempleados en mucho tiempo. De hecho, ha habido que rebuscar en la estadística del Servicio Público de Empleo Estatal (Sepe) hasta encontrar una época mejor y la hemos encontrado en 2008.
Málaga está en su cifra más baja de parados de los últimos 16 años, lo que viene a demostrar el largo y tortuoso camino que ha experimentado la economía y el empleo de la provincia.
A mediados de la década de los 2000, Málaga estaba en pleno auge económico por la burbuja del ladrillo. Se visaban más de 40.000 viviendas al año, los constructores se quitaban los obreros unos a otros, los bancos daban créditos casi sin mirar las nóminas... Y se redujo el paro de forma notable. En junio de 2007 había 82.549 parados. La cantidad, en cualquier caso, siempre es alta porque Málaga es una ciudad atractiva para vivir y trabajar y la población activa crece.
Aquello reventó y todavía colean en Hacienda varios de los pufos que se dejaron como se puede ver en la lista de morosos que se publicó la pasada semana. Los obreros que ganaban fortunas y a los que se sorteaban se quedaron en el desempleo, la economía cayó y el paro se disparó. En junio de 2008 ya había 103.495 (20.000 más que un año antes), en junio de 2009, 151.610; en junio de 2013, 202.581...
Fueron años tremendos que no conviene olvidar. Años en los que los medios hablábamos constantemente de cierres de empresas, de concursos de acreedores, de desahucios, de ruina. Solo el turismo lograba salvar algo los muebles.
Se salió, poco a poco, de esa crisis, gracias a la fortaleza del turismo, que en 2019 registró su récord histórico. Y vino la pandemia. Todos a casa, empresas cerradas y se puso de relieve la figura de los ERTE, que lograron amortiguar lo que habría sido una descomunal subida del paro.
Nos encontramos en 2024, donde el turismo, una vez más, es el gran motor y generador de empleo de la provincia. El Ministerio de Trabajo ha publicado hoy los datos y el paro cayó en junio en 2.909 personas en Málaga, siendo el cuarto mayor descenso tras los producidos en Madrid, Barcelona y Cádiz. Se ha dado de alta en la Seguridad Social, además, a 7.645 personas hasta alcanzar un total de 729.382 cotizantes, casi 25.000 más que hace un año.
Se está aún lejos de bajar de los 100.000 parados y seguramente no se va a conseguir, al menos, este año. Muchas contrataciones para el verano ya se han hecho y es habitual que incluso suba algo el paro en agosto o septiembre por la finalización de esos contratos.
En cualquier caso, la posición económica actual de Málaga es mucho más fuerte que la del anterior boom, que se demostró ser algo artificial. Ahora no hay burbuja. El precio de la vivienda está disparado, pero porque hay más demanda que oferta. Es un grave problema a resolver, pero, en cualquier caso, su respuesta implica la construcción de más viviendas y, por tanto, más empleo. También habrá que construir más infraestructuras (metros, trenes, autovías...).
Si se dan las condiciones económicas y las administraciones se ponen las pilas, y deben hacerlo por el bien de todos, la construcción tendrá un nuevo boom en los próximos años. El turismo seguirá viniendo y generando empleo y Málaga tiene otros dos pilares fuertes como son la agricultura y el área tecnológica. Hay esperanza, pero hay que trabajar y tener sentido común en las decisiones e inversiones a realizar.