Ha sido la sensación del fin de semana en la manga de Barcelona correspondiente al Campeonato del Mundo de Supersport 300. Julio García, joven malagueño sin antecedentes familiares en la competición, ya avisó en los entrenamientos libres al conseguir el mejor tiempo, algo excepcional para ser debutante. De hecho, no había podido participar en ninguna carrera anterior del mundial porque no había cumplido los 16 años reglamentarios.
Pero la gesta no quedó ahí porque después de clasificar su moto en la segunda fila de parrilla de la primera carrera, lograba un magnífico tercer puesto, luchando con pilotos mucho más experimentados y llegando a liderar la carrera en la última vuelta. Un comienzo brillante en su primera carrera mundialista en Supersport 300, un campeonato que han ganado cinco pilotos españoles en las seis ediciones disputadas hasta ahora.
Julio García se inició en las motos en la escuela Moto School de Málaga, con Carlos Siles al frente, quien dirigió los primeros pasos del joven piloto malagueño. Sin embargo, fue el abuelo del piloto el que después de regalarle una mini moto, consiguió que su nieto sea ahora un piloto con potencial ilimitado. De hecho, es el abuelo el que en su autocaravana transporta a los nietos, porque hay otro hermano menor que también compite.
Con este excelente resultado ya se están realizando gestiones para completar un presupuesto que le permita realizar el mundial siempre que los apoyos económicos completen el presupuesto necesario.