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Desde el inicio de la nueva presidencia de Donald Trump en enero de 2025, el paisaje de la diversidad en las grandes tecnológicas ha cambiado drásticamente. Lo que antes eran compromisos firmes con la equidad e inclusión se ha desdibujado bajo la presión política y social. Gigantes del sector han recortado o eliminado sus esfuerzos por fomentar el talento femenino y la representación diversa en las compañías que moldean el futuro digital. La promesa de un sector más inclusivo se enfrenta ahora a un retroceso que redefine las reglas del juego en Silicon Valley y más allá.

Es en ese contexto en el que este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, se celebra en Málaga la jornada "Redefine possible" (en español, "Redefinir lo posible"), el evento de referencia para el empoderamiento femenino en la comunidad techie malagueña. Tres mujeres —la mánager de producto Amalia Gómez, la desarrolladora de software Anna Zubova y la programadora polaca Dominika Zajak— desarrollarán a lo largo de la mañana charlas sobre productos digitales, código e Internet accesible como representaciónd el ingente talento femenino en el sector.

"La gente tiene que tener referentes. Si ves a más mujeres en charlas, ves que ellas pueden hacerlo", afirma en una entrevista con EL ESPAÑOL de Málaga Rosa Castillo, una de las principales organizadoras del encuentro: "Si no las ves, puedes reforzar la idea de que la tecnología solo es para hombres blancos ricos".

Esta idea se ve especialmente reforzada por el contexto político internacional. "Es muy importante tener este tipo de encuentros ahora mismo, cuando los derechos de las mujeres se deterioran", desarrolla Sophie Gruner, moderadora del evento: "Es más importante que nunca enviar un mensaje fuerte y mostrar el talento femenino".

La idea principal es potente: no se trata de únicamente luchar por sus derechos, sino también de hacer más patente todavía que muchas ya han sido capaces de alcanzar grandes logros. "Más que una celebración, es una conmemoración de que estamos cambiando... pero tenemos que seguir creciendo", sostiene la ponente Amalia Gómez.

Desde su perspectiva, los ingenieros "casi siempre son hombres" y ellas aportan "un toque diferente, por ejemplo, en producto" que resulta muy valioso. Diversos estudios han respaldado que la diversidad de género en equipos tecnológicos potencia la innovación y mejora el desarrollo de productos.

La jornada se celebra este sábado en las oficinas del Centro de la multinacional de origen ucraniano Ciklum, que también actúa como patrocinador del mismo. Está impulsado por la comunidad Málaga-AI, especializada en inteligencia artificial, con la colaboración de la iniciativa internacional Women TechMakers (WTM).

"Llevamos celebrando este día desde antes de la pandemia, y es un evento muy querido por la comunidad. La gente repite y se ven caras familiares, lo que significa que lo disfrutan", afirma la organizadora Rosa Castillo. Explica que, aunque la mayoría de las temáticas abordadas han sido técnicas, muchas veces también han tratado cuestiones de diversidad, síndrome del impostor, sesgos de la tecnología...

Para ello, cuentan con ponentes locales e internacionales. Cuando empezaron hace un lustro, los encuentros eran fundamentalmente en español. Ahora las hacen en inglés, y eso "atrae a más gente": "Hay un incremento de mujeres extranjeras yendo al evento", asegura Castillo, que subraya que el número de hombres que acuden a estas jornadas también está creciendo.

"Lo que nos dice las personas que atienden es que se sienten cómodas, en un ambiente cercano", plantea: "Mientras que en otros eventos la gente solo va a escuchar, nosotros ponemos esfuerzo en crear una atmósfera especial". Además de la charla en sí, esta conmemoración del 8M techie también incluye desayuno y networking, actividades colaborativas o una lotería de regalos para los asistentes.

El aforo máximo es de 70 personas, que ya lleva varias semanas agotado y cuenta con lista de espera. Castillo lamenta el "mal signo" de que este año no haya visto otros eventos similares en la Málaga tecnológica, aunque ve claro la pertinencia de insistir en este tipo de planteamientos "centrados en la comunidad".

"Dar visibilidad a modelos a seguir es un deber en el Día Internacional de la Mujer", reflexiona: "Cuando ves a mujeres hablando, estamos impactando de una forma quizás inconsciente en las próximas generaciones. Es algo más grande aún que el impacto directo".