Bioparc Fuengirola hace más de un año se despedía de Peek, el macho del grupo de orangutanes de Borneo que alberga el parque. Un fulminante infarto dejaba al grupo sin macho dominante. Ahora y tras las pautas indicadas por el programa de conservación del orangután de Borneo de la EAZA, Bioparc Fuengirola ha recibido un nuevo macho: Balu, al que cariñosamente sus cuidadores llaman 'Popo'.

Procedente del zoológico de Barcelona, se trata de un joven aún inmaduro de unos cuarenta kilos que cuando llegue a adulto alcanzará los cien, han indicado desde Bioparc Fuengirola en un comunicado. Con diez años, este ejemplar está listo para crear su propia familia y convertirse en el macho alfa de un nuevo grupo de orangutanes.

Jesús Recuero, director técnico y veterinario en Bioparc Fuengirola, ha explicado que "'Popo' tiene un buen carácter, es sociable y tranquilo. Los orangutanes se independizan alrededor de los nueve años, por lo que está en la edad natural de formar una nueva familia".

Para los traslados entre centros de conservación pertenecientes a la EAZA, se ponen en marcha cuidados protocolos que garantizan que durante este, el animal no sufra ningún tipo de estrés y que se encuentre en perfecto estado. Los que hasta ahora fueron sus cuidadores y los que se encargarán de ello en el centro de conservación malagueño, viajan acompañándolo durante todo el trayecto.

Una vez en Bioparc Fuengirola, comienza un proceso de adaptación a través del cual este gran primate conocerá a su nueva familia. "Los primeros días de adaptación ha podido ver al resto de orangutanes desde cierta distancia, oírlos, olerlos".

Después, ha continuado, "pasamos a permitir un contacto protegido a través de una puerta de malla metálica, a través de la cual se pueden ver y tocar de cerca. Se van conociendo, pero sin que puedan llegar a una posible confrontación. Hasta ahora todo ha sido muy tranquilo y todos los orangutanes se muestran amistosos entre sí".

Ahora, 'Popo' ya explora y reconoce su recinto. El último paso será el contacto directo con el grupo. "Lo haremos de uno en uno. Primero con Mukah y su hijo Sabangau. Cuando veamos que esto va bien, lo haremos con Suli y Neo. Estas primeras introducciones las haremos en el recinto interior, donde tenemos más control y posibilidades de intervenir si se diera un conflicto. Una vez que veamos que se llevan bien, dejaremos salir a todos juntos al exterior", ha agregado Recuero.

Así, según han explicado, pronto, los visitantes podrán conocer al nuevo miembro de la familia y verlo convivir con todos los demás.

Desarrollo

Son contados los momentos en los que los orangutanes tienen encuentros sociales. Uno de ellos es la época reproductiva. Los machos emiten una llamada fuerte y retumbante que puede viajar hasta un kilómetro para advertir a otros machos que estén en el área y a las hembras receptivas de la zona. Sin duda, una llamada al encuentro para unos y de atención para otros.

En la naturaleza, estos machos adultos y dominantes se encuentran dispersos y, como indicábamos antes, solitarios; pero defendiendo grandes territorios con varias hembras, como si de un harén disperso se tratara. Es tan notable el papel del macho dominante que la presencia de estos interrumpe o retrasa la maduración de machos adolescentes que viven en su mismo entorno.

Se trata de una estrategia evolutiva adaptativa. Permanecer con un tamaño más pequeño e inmaduro, a pesar de que puedan procrear con otras hembras, reduce la cantidad de comida que puedan necesitar para alimentarse y, al mismo tiempo, ese aspecto reduce el riesgo de un conflicto grave con el macho alfa.

Más del 60% de los orangutantes han desaparecido 

Según los datos de la UICN (Unión Internacional de la Conservación de la Naturaleza) los orangutanes no superan los 104.700 ejemplares. Unas cifras que suponen un 64 por ciento menos de los 288.500 registrados a principios de los años 70. Este organismo estima que, si sigue al mismo ritmo su disminución y las amenazas que lo provocan, la mayoría de sus poblaciones en libertad se extinguirán en los próximos 50 años.

El orangután de Borneo, endémico de la isla de Borneo, es una de las especies de primate más emblemáticas de las selvas tropicales del continente asiático.

Desde la apertura de Bioparc Fuengirola en 2001, entonces Fuengirola Zoo, el parque participa activamente en el programa de conservación y reproducción de la especie a nivel europeo (EEP), para ayudar a su conservación ex situ. El centro de conservación malagueño está comprometido con la situación del orangután de Borneo y su hábitat, desde 2013.

A través de la Fundación Bioparc, colabora con la asociación Borneo Nature Foundation para la conservación in situ de la especie, mediante acciones de restauración de hábitat y reforestación en el bosque de Sabangau, en Borneo. Además, desarrollan actividades de investigación en el bosque, formación y desarrollo de capacidades para promover el desarrollo sostenible y educación a las poblaciones para proteger los recursos naturales de la isla.