El verano aún no ha comenzado, pero ya ha tenido lugar un accidente con moto acuática en la costa malagueña. Además, el caso es complejo, pues el conductor estaba acompañado de su hijo, de apenas tres años de edad.
Los hechos ocurrieron este martes en la playa de Los Boliches, en Fuengirola. Según han informado fuentes municipales a EL ESPAÑOL de Málaga, ambos tuvieron que ser rescatados por los servicios de socorrismo, teniendo que intervenir los efectivos sanitarios, que atendieron al menor con síntomas de principio de hipotermia. Algunos testigos aseguran que el menor quedó inconsciente dentro del mar, pero como llevaba chaleco salvavidas, no llegó a ahogarse.
Los sanitarios lograron que el menor volviera a estar consciente y le estabilizaron usando mantas térmicas. Así, a continuación, padre e hijo pudieron marcharse del arenal por su propio pie, según cuentan las fuentes, quedando el episodio en un gran susto.
Dos muertes el pasado verano
El año pasado murieron dos jóvenes de 32 años en dos accidentes con motos de agua en la costa malagueña. Una chica falleció en El Palo el día 17 de julio, cuando se celebraban las fiestas de la Virgen del Carmen, mientras que otro joven moría el 9 de agosto frente al paseo marítimo Rey de España, en Fuengirola.
Ambos accidentes fueron en contextos totalmente distintos. Marina, la primera joven fallecida, estaba festejando el día de su muerte en El Palo las fiestas del Carmen con unos amigos. Cuando viajaba en la moto de agua acompañada de unos amigos, esta cayó al mar por motivos que no han trascendido. Ni el conductor ni la otra persona que viajaba a bordo de esta embarcación fueron conscientes de que Marina ya no estaba en su asiento hasta que a uno de ellos se le voló una gorra y vieron el cuerpo de Marina flotando en el agua.
Tampoco se conoce si Marina murió en el mar o llegó con vida a tierra tras el golpe. Tras conocerse el suceso, trascendió que el conductor de la moto viajaba bajo los efectos de las drogas y el alcohol, por lo que la familia, a través de su abogado, pidió justicia días después de su muerte en diversos medios de comunicación.
El otro joven falleció en una situación diferente. Viajaba en moto con otra persona en una zona de alta mar cuando, al parecer, este sufrió una mala caída que le condenó a su fallecimiento. No hubo ninguna embarcación más implicada.
La opción de alquilar barcos y motos de agua en la Costa del Sol durante el verano se ha convertido en algo muy común, especialmente para celebrar cumpleaños y despedidas de soltero/a tras la pandemia. En ocasiones, sus conductores y acompañantes no son conscientes de la peligrosidad que puede tener hacer un mal uso de estas embarcaciones.