El pasado jueves por la tarde, Tino fue visto por última vez en la zona de Lagos, en Vélez-Málaga, como hacía habitualmente, se fue a pescar a la zona recreativa a la entrada de esta zona de la Axarquía. Era muy aficionado a esta disciplina deportiva. Sin embargo, a la mañana siguiente solo encontraron allí su caña y algunos enseres personales, como su cartera y su móvil, pero ni rastro de él. Así comenzaron los días de búsqueda tan difíciles para su familia que, de momento, no han dado sus frutos.
En el momento de su desaparición, el mar se encontraba bastante embravecido por el fuerte viento en algunos puntos del litoral, por lo que no se descarta que pudiera sufrir un accidente, aunque de momento todas las hipótesis están abiertas.
En la zona se hallaron diversos enseres suyos y una caña de pescar. El teléfono 112 recibió a las 10:30 horas del viernes una llamada que alertaba de la desaparición de este hombre, de 60 años, en la playa de Pijil-Lagos.