Pese a que sus precios están alejados del bolsillo de la inmensa mayoría de los mortales, la venta de las viviendas incluidas en las grandes torres que empiezan a levantarse en Málaga alcanza un ritmo casi inesperado.

La pujanza de la capital de la Costa del Sol no pasa desapercibida a un cliente finalista con un alto poder adquisitivo. Tanto como para ser capaz de desembolsar 3,2 millones de euros y comprar sobre plano uno de los pisos de lujo de la torre que Sierra Blanca ejecuta en el litoral oeste de la ciudad.

La suya es una de las tres edificaciones de 21 plantas que ya toman forma en los suelos situados junto a la antigua central térmica. Las otras dos están en manos de Metrovacesa, cuyos responsables confirman el avanzado estado de comercialización del producto residencial ya puesto en el mercado.

Una simple consulta a la web de esta empresa, uno de los grandes referentes nacionales del sector inmobiliario, permite a cualquier interesado saber que aún puede hacerse con la propiedad de una vivienda de 377,36 metros cuadrados, a los que sumar 98,94 metros de terraza, con cuatro dormitorios y cuatro baños en la planta 19 de una de sus dos torres. Eso sí, tendrá que desembolsar algo más de 3,4 millones de euros (sin IVA).

Sin embargo, esta misma persona no puede saber cuál es el precio de las unidades más exclusivas, las que se localizan en la planta 21 de cada una de las edificaciones diseñadas por Carlos Lamela. "El precio de los áticos no se publica", admite el CEO de Metrovacesa, Jorge Pérez de Leza.

Es el secreto mejor guardado por quienes impulsan estas operaciones residenciales. Según De Leza, dada la particularidad del producto, el valor final suele ser objeto de conversación directa con el comprador interesado. Asegura que pese a esta ausencia de detalles públicos, hay interés.

"Se van a vender, lo que pasa es que se suelen vender más al final, porque los clientes ven que es un producto que, a diferencia de lo que sucede con las plantas más bajas, no se lo van a quitar de las manos; esas viviendas tienen un cliente que quiere personalizarlas, que quiere ver las vistas que tiene", explica. Razón de más para, como señala, "tener paciencia, no hay que tener miedo, el producto es único y se va a vender".

La posición de Sierra Blanca es semejante, aplazando el momento en que saldrán al mercado. En su caso, dos áticos de 340 metros interiores y 162 metros de zona exterior, con materiales de primera calidad y diseño. Su estrategia incluye una presentación nacional e internacional.

A la espera de que se ponga luz sobre el secreto de estos áticos, los datos manejados por ambas promotoras confirman un buen proceso de venta. De las 71 viviendas de la primera torre que Metrovacesa puso en el mercado meses atrás, se ha vendido el 70%.

"Se venden de más abajo a más arriba”, destaca el CEO de la compañía, quien informa de que aprovechando el Simed se va a lanzar comercialización de la segunda torre con un paquete inicial de diez viviendas. “Van a volar porque la lista de espera que tenemos es alta”, añade. 

La satisfacción en Metrovacesa es alta. "Del primer edificio quedan por vender 22 viviendas y quedan más de 15 meses de construcción", precisa. Incluso, De Leza pone en valor que existe mucho comprador nacional, "que ve en Málaga un destino para esa especie de residencia y media, con la posibilidad de pasar tres o cuatro días". A éste se suma el cliente internacional, que puede representar el 45% de las operaciones ya cerradas.

La situación de Sierra Blanca es parecida. Hablan de algo más del 60% de venta de sus 71 viviendas. "De la planta 9 o 10 hacia abajo está todo; la última venta más elevada fue por 2,2 millones y antes hubo otra de 3,2 millones", destaca Carlos Rodríguez.

Torres de Martiricos

¿Qué ocurre con las dos torres de Martiricos? El proyecto impulsado por AQ Acentor se va a traducir en la construcción de los edificios más altos de la capital, con 30 plantas y más de 100 metros de altura.

Una de ellas, la sur, va a albergar 250 viviendas en venta, de las cuales ya se ha comercializado un 53%. Un estudio de 35 metros cuadrados tiene un precio de 175.000 euros. La otra torre, la norte, albergará unos 200 pisos en alquiler. Estarán situados entre las plantas 14 y 30; los niveles inferiores, del 1 al 13, acogerán un hotel.

El proyecto en su globalidad se va a traducir en una inversión de unos 180 millones de euros. De acuerdo con los detalles aportados por la promotora, el avance en la construcción es del 14%. Asimismo, se prevé la entrega de las viviendas a finales de 2023.

AQ Acentor desarrolla en la provincia de Málaga más de 1.200 viviendas, en cinco proyectos, con una inversión de 390 millones. De todo el conjunto residencial, 550 pisos son en alquiler. Y dentro de esta modalidad destaca la promoción Jacarena, con 350 unidades.

Las mismas estarán concentradas en tres edificios, dos de ellos de 46 metros y un tercero de 74 metros de altura. Los trabajos alcanzan el 23% de ejecución, con la previsión de que sean entregados en el primer semestre de 2023. La inversión se estima en unos 85 millones.