Durante años, los trabajos de construcción de los dos últimos tramos del Metro de Málaga en su aproximación definitiva al Centro de la ciudad han obligado a mantener abiertas varias rampas de acceso al interior del túnel. Puertas necesarias para garantizar el acceso de todos los operarios y el material necesario para completar la infraestructura en sus numerosas etapas.

Conforme la obra se ha ido completando, todos estos puntos han sido clausurados. Todos, excepto uno; el que permanece operativo en Callejones del Perchel. Pero la Junta de Andalucía ya empieza a ponerle fecha de caducidad.

Y con ese pensamiento, asumido que el recorrido hasta la Alameda deberá estar operativo antes de finales de 2022, la Consejería de Fomento acaba de licitar el servicio para la redacción del proyecto de construcción del cierre de la última rampa de acceso al túnel. Una labor que incluirá la restitución final del viario afectado.

El viario en cuestión aún dispone de elementos de señalización correspondientes al desvío de tráfico y a las afectaciones a la movilidad derivados precisamente de la presencia de esa rampa de obra. "Debe recogerse en un proyecto las actuaciones necesarias para restituir el viario a su situación original", se detalla en el objeto de la licitación que acaba de activar la Administración regional.

El valor económico del encargo es bajo. 39.467,66 euros, incluyendo el IVA, mientras que el plazo asignado es de dos meses. Las empresas interesadas tienen hasta el 12 de enero para presentar sus propuestas.

La firma finalmente elegida tendrá que, según se recoge en el pliego de condiciones técnicas, determinar el modo de cerrar la rampa de acceso que está siendo utilizada por todos los contratos de obras en desarrollo y que en un futuro inmediato será utilizada por el contratista que implante la señalización ferroviaria, la supresión del desvío de tráfico asociado a la rampa de entrada y resto de elementos de señalización del viario adyacente y la restitución final de la urbanización afectada.