Suspendido definitivamente el Belén Viviente Diocesano de Málaga por la evolución de la Covid

La organización del Belén Viviente Diocesano de Málaga, que aplazó su celebración desde el pasado mes de diciembre a estos próximos 14 y 15 de enero, ha suspendido definitivamente la celebración del mismo debido a la situación sanitaria actual, en plena sexta ola de la Covid-19.

Así, han considerado que esta decisión es la "más prudente posible" dadas las circunstancias sanitarias, agradeciendo la acogida mostrada hacia este Belén Viviente. "Empezamos a organizar ya con gran ilusión la siguiente edición, que se celebrará en el próximo mes de diciembre", han añadido desde la Fundación Victoria.

No obstante, han recordado que todas las personas que estén interesadas en realizar su donación de juguetes en favor de la Asociación AVOI, pueden entregarla en la sede de dicha entidad, situada en Camino Suárez, 6.

El pasado mes de diciembre desde el Obispado de Málaga destacaron la importancia de anteponer la salud y la seguridad tanto de los alumnos que participan en dicho Belén Viviente como de los visitantes. El Belén Viviente de 2021 solo pudo llegar a recibir las visitas de unos 1.200 escolares, sin que diera tiempo a abrirse al público general por la irrupción de la sexta ola, con un elevado número de contagios de Covid que aun continúa.

Las siete escenas evangélicas de la Natividad (Anunciación a María; Visitación; Censo; Palacio de Herodes; Anunciación a los pastores; Nacimiento y Adoración de pastores y Reyes Magos) y las actividades lúdicas preparadas para toda la familia, ocupaban un total de 3.600 metros cuadrados de la Casa Diocesana.

La representación de los pasajes bíblicos y la recreación del ambiente de la ciudad de Belén en el año 1 la llevaban a cabo 120 alumnos del colegio diocesano Padre Jacobo, mientras que otro grupo de alumnos del colegio diocesano Cardenal Herrera Oria se encargaba de guiar a los visitantes por las distintas escenas.

Ahora, habrá que esperar al próximo mes de diciembre para disfrutar de este tradicional Belén Viviente Diocesano, que en 2020 ya se tuvo que celebrar de manera virtual por la pandemia de la Covid-19.