Superado el frenesí de Semana Santa y los quebraderos de cabeza generados por el problema con los suministros de obra, el Ayuntamiento de Málaga ya pone fecha para terminar la primera de las fases del proyecto de reurbanización de la calle Carretería. La pretensión municipal es que el tramo Tribuna de los Pobres-Postigo de Arance esté completado a lo largo del mes de junio.
De acuerdo con el calendario apuntado por el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, se quiere que dentro de la primera quincena del mes que viene quede resuelto el arquetón construido, incluyendo su cierre en superficie.
A este primer paso suma un segundo, que podría estar en la segunda quincena, correspondiente a la terminación de las actuaciones en la parte que se extiende entre la Tribuna de los Pobres y la calle Cisneros.
Las previsiones temporales ahora manejadas por Urbanismo distan mucho de las que se previeron en el arranque de los trabajos, a principios de octubre del año pasado. Conforme a la adjudicación del proyecto en su integridad, otorgado a la unión temporal de empresas (UTE) integrada por Acsa y Hormacesa, la fase inicial iba a requerir seis meses.
Es decir, que tendría que haber estado resuelta para principios de abril. Sin embargo, la aparición de "los tirantes de unos muros" construidos a modo de sostén del avance del río Guadalmedina obligó a intervenir sobre los mismos. Una circunstancia que retrasó el ritmo de ejecución, llegando a poner en peligro, incluso, el paso de las cofradías de Semana Santa.
Finalmente, tras acometer una intervención provisional y en precario, que incluyó el vallado de buena parte de la Tribuna de los Pobres por razones de seguridad, las cofradías sí pudieron transitar por el eje, aunque acortando su desplazamiento.
Según López, una vez completada la primera fase se dará inicio a la segunda, fijada entre Postigo de Arance y la Plaza San Francisco. El edil ha apuntado la posibilidad de que coincidan temporalmente la terminación de la primera con el inicio de la segunda etapa.
No obstante, confía en que ello sea cuestión de apenas unos días, facilitando las alternativas para el tráfico. Para finalizar en su totalidad la obra restarán aún otras dos etapas: Plaza San Francisco-calle Ollerías, Ollerías-Dos Aceras/Álamos.
La ejecución de esta obra tiene un coste global de 3,8 millones de euros (IVA incluido). Una vez completada, dejará a un mismo nivel toda la calle, aumentando de manera clara el espacio peatonal. Uno de los efectos más evidentes es que, según los estudios, el tráfico de paso se reducirá un 21%. Para controlar que eso sea así se instalarán cámaras mediante las que filtrar el acceso a aquellos vehículos autorizados.