Siguiendo la línea favorable que ya dejó el año 2021, 2022 avanza de manera "excepcional" para el puerto de Málaga. Un término perfectamente aplicable tras conocer los datos de tráficos del recinto al cierre del primer semestre del ejercicio, en el que vuelve a ser el puerto con mayor crecimiento de actividad en toda la geografía española.

En términos absolutos, según la información aportada este martes por el presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio, y por el director del recinto, José Moyano, entre los meses de enero y junio son casi 3 millones de toneladas de mercancías las movilizadas, lo que supone "un récord".

Muestra del peso que tiene este valor es que supera con creces los 1,6 millones de toneladas de 2021 y las 1.583.114 de 2019, periodo previo a la llegada de la Covid. Aunque la mejora es apreciable en casi todas las esferas de actividad, lo es especialmente en la de contenedores, con la llegada de al puerto malagueño de 165.269 TEUs (unidades de contenedor), un 83,5% más que un año antes, lo que ha supuesto un movimiento superior a los 1,8 millones de toneladas. Este parámetro se dispara un 186% respecto a 2021.

"Lo importante no sólo es que recibimos más contenedores sino que vienen cargados", ha resaltado Rubio, quien relaciona este buen comportamiento con la puesta en marcha de líneas de conexión con América Central y Caribe, India, Australia… Las previsiones manejadas por el Puerto apuntan a que podría cerrarse este año con unos 330.000 contenedores y un tráfico de mercancía superior a los 3,6 millones de toneladas.

A esta parte esencial de la operativa del recinto malagueño hay que agregar el buen comportamiento que está teniendo el tráfico de pasajeros. En el caso de las líneas que unen Málaga con Melilla, han sido 114.667 los viajeros que han usado este enlace, lo que supone un 101% más que el mismo periodo del año pasado.

El presidente de la Autoridad Portuaria ha puesto en valor también el comportamiento de la Operación Paso del Estrecho (OPE), con más de 40.000 pasajeros, superando en un 40% lo ocurrido en 2019. “Lo que está ocurriendo es excepcional y la idea es que las próximas semanas sigan siendo excepcionales, la duda es qué va a pasar con la vuelta”, ha indicado.

En cuanto a los cruceros, la subida tanto en escalas como en pasajeros es progresiva. Hasta junio han sido 112 las escalas registradas (la previsión es llegar a entre 160 y 170 a final de año), con 98.254 pasajeros.

Es un valor muy superior a los de 2021 y 2020, cuando la llegada de buques estuvo ciertamente limitada, pero aún está por debajo de los casi 200.000 viajeros de 2019. Sea como fuere, Rubio confía en que la situación de los cruceros y la ocupación de los mismos se haya normalizado a lo largo de 2023.