La Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés) estudia si instalar parte de su equipo en Málaga para monitorizar las políticas públicas al respecto en la zona del mar Mediterráneo.
Las conversaciones con esta agencia con sede en Viene tienen una antigüedad de más de 2 años y han involucrado hasta al alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre. En las próximas semanas, una misión de la UNODC explorará si su personal puede integrarse en la Costa del Sol, han informado desde el centro dependiente de las Naciones Unidas CIFAL Málaga.
El asentamiento, no obstante, depende todavía del criterio tanto de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito como el del Ministerio de Asuntos Exteriores del Gobierno de España, y tiene "muchísima burocracia" aún pendiente.
Es un paso más del idilio entre Málaga y la Organización de las Naciones Unidas, que tiene su máximo exponente en el propio CIFAL. En el cuarto aniversario del establecimiento en la ciudad de este Centro Internacional de Formación de Autoridades y Líderes, su director general, Julio Andrade, ha atendido a los medios de comunicación en un desayuno informativo.
El equipo en Málaga de esta entidad dependiente del Instituto de las Naciones Unidas para la Formación y la Investigación (UNITAR) consiste en siete personas con dedicación total, hasta 13 si se cuentan aquellos con horario parcial. Aunque su sede está en la ciudad andaluza, han realizado actividades en África, Latinoamérica, Oriente Medio o Norteamérica. Hay 25 centros de este tipo en todo el mundo, el de Málaga fue el nº 17 en orden de inauguración, y actualmente es "el más activo de todos", de acuerdo con Andrade.
La relación entre la ONU y Málaga surgió en torno a 2007, cuando ya se celebró una cumbre sobre el mar Mediterráneo. En 2009, se convirtió en la primera ciudad del mundo en firmar un acuerdo de cooperación con las Naciones Unidas como urbe, y no como estado, explican desde esta sede de CIFAL. Justamente, cuando en 2010 se creó esta red de centros de formación, les plantearon la posibilidad de que fuese en Málaga.
Ese lazo estrecho entre la organización supranacional se ha traducido en la celebración en la capital de la Costa del Sol de cumbre internacionales como la de lucha contra el terrorismo, en mayo de este mismo año, o encuentros mundiales sobre finanzas globales.
Ahora, CIFAL Málaga tiene ya también aprobados estatutos y nombres para establecer como su sociedad gestora la nueva Fundación para el Desarrollo Sostenible, lo que diluirá el peso del Ayuntamiento y les permitirá realizar proyectos de otra envergadura. El rector de la Universidad de Málaga, José Ángel Narváez, será el presidente de esta fundación, han adelantado desde la entidad dependiente de la ONU.
Son síntomas de la expansión de esta oficina supranacional en Málaga, a la que se puede sumar próximamente UNODC.