El Ayuntamiento de Málaga mantiene su presión sobre la Casa Invisible y vuelve a pedir al juzgado la autorización necesaria para proceder al desalojo del colectivo social y cultural que hace ahora más de 15 años okupó de manera irregular un edificio municipal en el Centro histórico.
Según ha confirmado el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, el paso adelante dado por el Consistorio se produce después de que fuese desestimada la medida cautelar presentada por La Invisible para evitar la entrada en el inmueble, localizado en la calle Nosquera.
No es la primera ocasión en la que el Ayuntamiento avanza en este mismo camino, sin que hasta la fecha haya obtenido el beneplácito para poder intervenir y desocupar la edificación. Una de las razones expuestas por los responsables municipales para plantear esta medida es la necesidad de intervenir sobre la construcción, con el objeto de proceder a una amplia labor de rehabilitación de la misma, dado su mal estado de conservación.
Frente a la tesis del equipo de gobierno, que asegura que se pretende dar cumplimiento a los acuerdos adoptados por la Junta de Gobierno Local, La Invisible considera que la estrategia municipal busca "hacer desaparecer un proyecto social y cultural único en la ciudad".
Al tiempo, recuerdan la existencia de un manifiesto con el que se busca retomar el diálogo y encontrar una solución negociada entre las partes. "Ante esta enésima amenaza de desalojo, la Casa Invisible responderá con la alegría y la determinación que le caracteriza, retomando las acciones públicas en contra de esta medida y continuando con su intensa actividad cultural", explican por medio de un comunicado.
En el mismo, incluso, subrayan que el manifiesto por el diálogo ya cuenta con el apoyo y la firma de diversos premios nacionales de distintas disciplinas como Aurora Luque (Poesía 2022), Rogelio López Cuenca (Artes Plásticas 2022), Dora García (Artes Plásticas 2021), Guillermo Busutil (Periodismo Cultural 2021), Alfonso de la Pola (Circo 2017), Miguel Ángel Moreno Bolo (Circo 2016) o Chantal Maillard (Poesía 2004).
Y va a más al destacar que la iniciativa, "convertida en un referente de cultura crítica y colaborativa en la ciudad", tiene importantes apoyos institucionales y ciudadanos. Respecto al conflicto judicial con el Consistorio, recuerdan desde La Invisible que el contencioso-administrativo fue abierto en 2018, estando aún pendiente de resolución.
Por ello, cuestionan que ela Administración local vuelva a reclamar el desalojo "sin que todavía sea firme la denegación de la medida cautelar de suspensión interpuesta en relación con el intento de desalojo de la primavera pasada". Para el colectivo, esta "insistencia" denota una "apuesta acelerada y definitiva por la vía unidireccional de la fuerza".