El Ayuntamiento de Málaga completa el trámite para convertirse legalmente en propietario de la parcela de oro de la calle Pacífico. Tras formalizar hace casi un mes la compra del terreno a la Tesorería de la Seguridad Social, los responsables municipales han firmado este lunes en la notaría la operación de adquisición, que asciende a 6.746.000 euros.
Una vez rubricada la documentación, el patrimonio municipal de suelo pasa a incorporar una pastilla de 8.775 metros cuadrados de superficie en el litoral oeste, en un emplazamiento con clara vocación de convertirse en una nueva centralidad urbana.
La finca, baldía desde hace ya unos 17 años, tras fracasar la apuesta del Gobierno por construir en la misma la nueva sede del Instituto Nacional de la Seguridad Social, se localiza junto a la antigua Tabacalera, que ya acoge el Polo de Contenidos Digitales y el Museo Ruso, entre otras instalaciones, y al futuro edificio de oficinas promovido por la empresa Insur.
Con este movimiento se pone fin a un camino activado hace algo más de un año, cuando la Gerencia de Urbanismo abrió la puerta a recuperar un terreno que ya fue vendido al organismo estatal por 8,7 millones de euros. El pretendido destino del mismo era construir la nueva sede provincial del Instituto de la Seguridad Social, propuesta que quedó en agua de borrajas.
Tras el avance de las conversaciones entre las dos instituciones, el pasado mes de junio se realizó un primer desembolso, por algo más de 1,6 millones de euros, correspondiente al 25% del valor pactado entre las dos partes. El acuerdo final por parte de la Tesorería de la Seguridad Social avalando la propuesta de enajenación tiene fecha del pasado 22 de agosto, teniendo como destinatario el Ayuntamiento de Málaga.
Respecto al futuro de la parcela, el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, mantiene la duda sobre el destino final, aunque insiste en que la operación va a permitir a la ciudad disponer de "más dotaciones para albergar proyectos de ciudad con una relevancia importante". El sector está calificado actualmente como equipamiento, lo que acota los posibles destinos futuros de la misma.
Su inclusión en la bolsa de suelos municipales genera una nueva oportunidad de desarrollo directo o mediante acuerdos con socios privados interesados en asentar sus propuestas en la ciudad, como ya ha ocurrido, por ejemplo, con los dos campus universitarios adjudicados a la X el Sabio y la Europea de Madrid.