Aislamiento de fachadas y cubiertas, instalación de placas fotovoltaicas, cambio de ventanas y, en algunos casos, colocación de ascensores. Estas son las principales mejoras de las que se van a beneficiar en unos años más de 1.200 vecinos de dos de los barrios más desfavorecidos de Málaga capital, Palmilla y San Andrés, gracias a las ayudas procedentes de los fondos europeos Next Generation.
A la espera de que los planes del Ayuntamiento para estas dos zonas sean validados de manera definitiva (consta aprobación provisional), EL ESPAÑOL de Málaga ha podido profundizar en el impacto social y económico que va a tener su ejecución. Los 12,5 millones de euros previstos van a permitir intervenir en un total de 581 viviendas.
Del conjunto, 481 se localizan en parte del barrio de San Andrés, repartidas en tres grandes bloques que integran 13 portales de pisos ocupados por familias con unos niveles de renta ciertamente limitados. La operación tiene un coste estimado algo superior a los 9,5 millones de euros.
"¿Qué se va a hacer? Rehabilitación energética, aislamiento en fachada y cubiertas, placas fotovoltaicas, ventanas, repaso infraestructuras eléctricas y saneamiento interior", explican desde el ente municipal. Una vez materializadas estas mejoras, la previsión es que el consumo energético de las viviendas se reduzca en cerca del 60%, pudiendo generar un ahorro en la factura mensual de los propietarios de un 50%.
La relación del número de inmuebles que se beneficiarán de la intervención y el coste total estimado de la actuación tiene como resultado un coste medio por vivienda de 19.800 euros. Dada la particularidad de las ayudas empleadas, se da la circunstancia de que un número importante de propietarios no tendrá que pagar nada.
La horquilla establecida en el propio plan es que las ayudas cubren entre un mínimo del 80% y un máximo del 100%, dependiendo el porcentaje definitivo de los ingresos de las familias.
"Incluso las familias que tengan que pagar algo tendrán que hacer frente a un máximo de 3.800 euros, a repartir en unos 10 años; son unos 31 euros al mes", añaden las fuentes, que indican que esta cifra viene a compensarse con el ahorro en energía.
En Palmilla, donde hay que recordar que el Ayuntamiento lleva años realizando una amplia labor de rehabilitación, son 100 las viviendas incluidas en este plan de mejora energética, con un valor medio por casa de 29.000 euros. ¿Por qué esta diferencia de 10.000 euros entre ambas barriadas?
Las fuentes indican que la razón hay que encontrarla en que además del aislamiento, las placas solares y otras actuaciones ya previstas en San Andrés, hay que sumar la colocación de ascensores en los cinco inmuebles en los que se va a intervenir.
Es justamente el factor socioeconómico uno de los que pesó en su momento en la Junta de Andalucía a la hora de seleccionar San Andrés y Palmilla de entre las cinco localizaciones planteadas por el Consistorio para desarrollar estas importantes actuaciones. Las otras tres, según han informado desde el Instituto Municipal de Vivienda (IMV) eran El Sixto, San Martín y Portada Alta.
Agente rehabilitador
Una de las grandes novedades de este programa de ayudas, que está exento para los propietarios a la hora de presentar la declaración del IRPF, es que se articula mediante la figura del agente rehabilitador. ¿Qué es? En este caso, una empresa privada que asume el protagonismo absoluto en la actuación, de manera que es la que se pone en contacto con las comunidades de propietarios para hacerse cargo del proyecto.
"Lo que hace ese agente es pedirle a los propietarios que le cedan la subvención; ella se encarga de hacerlo todo. Incluso, cabe la posibilidad de que gestione el recibo de la luz a los beneficiarios de las ayudas, compensando los que les corresponde pagar de la obra con el ahorro en la factura de la luz", indican. En el caso de Málaga es la primera vez que funciona este actor.
En este punto es importante conocer el papel que tiene el Ayuntamiento en esta iniciativa. Según detallan, estará controlando la gestión de las ayudas, así como los plazos de desarrollo de los trabajos. De acuerdo con la naturaleza de las ayudas tienen que estar finalizadas antes del 30 de junio de 2026.
Conforme a estas explicaciones, son las empresas las que directamente se pondrán en contacto con los vecinos para hacerles sus ofertas. Las comunidades deberán solicitar al menos tres propuestas y decidirse por una de ellas. Entre las grandes constructoras que en los últimos años ya han creado departamentos de agentes rehabilitadores están Ferrovial y Acciona.