El proceso de chapa y pintura al que está siendo sometida la parte baja del encauzamiento del río Guadalmedina en Málaga sigue avanzando. Si los primeros en llegar fueron los árboles que han sido plantados en sus bermas y en la parte última de la desembocadura, ahora ha llegado el momento del adecentamiento de los muros.
Este lunes, un día después del cierre de las urnas y de que Paco de la Torre haya recuperado la mayoría absoluta, los operarios trabajan ya en pintar de verde las paredes del cauce. Un trabajo que, dada la extensión de la superficie a cubrir, llevará aún varias jornadas antes de quedar completadas.
Ambas acciones forman parte del plan de transformación diseñado por el Consistorio para mejorar las condiciones de esta parte del Guadalmedina, generando un espacio verde y ajardinado.
Con un marco de plantación a tresbolillo (es decir, formando triángulos) y con una separación de alrededor de 20 metros, en ambos márgenes, ya hay 64 ejemplares de Jacaranda mimosifolia, Delonix regia, Salix babilónica, Erytrina caffra, Bauhinia sp, Sophora japónica, Albizia julibrissin, Grevillea robusta y Paulownia tormentosa. La longitud de las alineaciones es de 1.200 metros, alrededor de 600 metros por cada lateral.
El plan comprende cinco actuaciones: la plantación de 7.400 metros cuadrados de zona de pradera, la eliminación de los grafitis desde el puente de la Aurora hasta un poco más abajo del puente de Tetuán, con unos 5.000 metros cuadrados; así como los dos puentes metálicos, el de los Alemanes y el de la Trinidad.