El previsible éxito del Metro de Málaga con la llegada de la Navidad y el encendido de las luces en la calle Larios se está viendo más que confirmado con los hechos. Una muestra evidente del matrimonio entre el suburbano y los malagueños que acuden a diario al Centro a ver el alumbrado es la imagen que presenta a estas horas la estación Atarazanas, localizada en el lateral norte de la Alameda Principal.
La imagen y los testimonios de algunos de los usuarios corroboran la existencia de una gran cola de viajeros en el interior del andén de acceso a los trenes. Son los operarios de Metro de Málaga los que, ante la gran afluencia de público, están organizando el acceso a la parada. Y, por lo que parece, lo están haciendo con éxito, evitando de este modo el posible conflicto entre los que salen del tren y los que entran.
Lo parece claro es que muchos de los que acudan ahora a la estación Atarazanas lo mismo tienen que armarse de paciencia y esperar algo más de lo inicialmente previsto. Hay que recordar que para responder adecuadamente al aumento de la demanda en estas fechas, la empresa concesionaria de la explotación comercial había programado un refuerzo importante en la frecuencia de los trenes. En concreto, uno cada 5 minutos y 20 segundos.