El camino que ha de recorrer la Junta de Andalucía antes de poder afrontar el inicio de las obras del Nuevo Hospital de Málaga se antoja aún extenso en el tiempo. Aunque por el momento no hay concreción oficial respecto a la hoja de ruta que queda por delante, la realidad es que no ha sido hasta el pasado mes de diciembre cuando los técnicos de la Administración regional han podido empezar a analizar y evaluar el proyecto constructivo presentado por la unión temporal de empresas que resultó adjudicataria de la operación, integrada por el Estudio Lamela; Aidhos Arquitect; Arcs Estudios y Servicios, y Sener, Ingeniería y Sistemas.
De acuerdo con varias fuentes consultadas por EL ESPAÑOL de Málaga fue en diciembre cuando este equipo técnico hizo entrega del proyecto de ejecución del equipamiento sanitario, llamado a ser el edificio público más grande de Andalucía. Los datos confirman este hecho, dado que tendrá un techo edificado de 270.000 metros cuadrados, en los que se dará cabida a 810 habitaciones, 198 consultas y 42 quirófanos, entre otros.
Una vez dado este primer paso, cumpliendo el compromiso adquirido con la Consejería de Salud, corresponde a la Administración regional analizar el documento, con el objeto de validar o solicitar ciertos ajustes. Este periódico ha contactado con la Consejería de Salud para conocer el estado de la cuestión, sin que por el momento haya tenido información al respecto.
Sólo en el momento en que tenga el visto bueno definitivo será cuando se podrá avanzar a la siguiente casilla, que será la licitación de las obras de construcción del centro hospitalario, que, según los primeros datos, puede requerir una inversión de al menos 380 millones de euros. El equipamiento sanitario destacará por sus dimensiones, ya que estará conformado por cuatro torres de 15 plantas de altura, de las cuales 12 están sobre rasante.
Cabe la posibilidad de que la pieza del Nuevo Hospital no sea la primera en ser licitada. Una de las opciones que se viene manejando, de acuerdo con el planteamiento de las propias empresas responsables del diseño, es la de desgajar el complejo en dos partes. Una de ellas vinculada exclusivamente al gran edificio de aparcamientos que completará el hospital, con capacidad para unas 2.000 plazas.
En este caso concreto, las fuentes indican que el documento específico fue entregado el pasado mes de agosto. Tras ser revisado por los técnicos, desde la Junta se han solicitado ciertos ajustes.
Habrá que esperar a conocer el momento en que se activan ambos concursos para profundizar en los tiempos de ejecución que va a necesitar esta gran infraestructura. De inicio, hay que tomar en consideración el compromiso asumido por la Junta de que abra sus puertas a lo largo de 2027. De hecho, se ha llegado a vincular su materialización con los tiempos de desarrollo del trazado del Metro soterrado hasta el entorno del Hospital Civil, que también se espera para finales de ese año.
Y, como ocurre con el ramal del suburbano, cada día que se alargue la activación de los procedimientos para la adjudicación de los trabajos va en contra de la posibilidad cierta de cumplir con el calendario antes mencionado.
Entre las particularidades que tendrá este gran centro está la apuesta de los diseñadores por dotarlo de la mayor "humanización" posible. Y con este objetivo se busca dar un paso más para que el paciente, los médicos, el personal específico y los acompañantes "tengan la sensación de estar en un sitio más agradable de lo habitual".
¿Y cómo alcanzar esa meta? Carlos Lamela destacaba meses atrás que mediante actuaciones ciertamente "sencillas" y de un coste muy moderado. "Hablamos de incorporar una arquitectura más tranquila, del color, de la vegetación… O de crear algunas áreas donde haya música de un determinado formato que ayude a relajar e incluso buscar elementos como la aromaterapia para que el hospital no huela siempre a hospital", expuso.