"Al principio pensaba que me quedaba en la calle y ahora siento que me ha tocado la lotería". Es el pensamiento que verbalizan en el interior de la Peña Perchelera dos de las más antiguas vecinas de El Perchel. Las dos tienen en común que durante más de 40 años han habitado el popular barrio de la capital de la Costa del Sol. 

En estos pisos de alquiler, que se levantan deteriorados en las calles Malpica y Montalbán, entre otras, han crecido, han criado a sus hijos y han envejecido. Y ahora son protagonistas directas de una historia con final feliz.

De los nubarrones con los que amaneció el proyecto inmobiliario liderado por la promotora inmobiliaria Dazia, a un encuentro festivo en el que representantes de la empresa han compartido espacio y vivencias con los vecinos de los bloques que en unos meses serán derruidos para ver el nacimiento de unas 200 viviendas de nuevo cuño.

Momento de la celebración del encuentro alcanzado para el desalojo.

Lo ocurrido en Callejones del Perchel, como ha venido insistiendo Francisco Gutiérrez, ex-Defensor del Ciudadano de Málaga, quien ha ejercido de representante de los residentes en estos años, es un modelo que tratan de seguir en otras muchas ciudades de España. 

Carmen es una de las inquilinas de renta antigua a la que Dazia ha compensado con 170.000 euros, dinero que le ha permitido comprarse una vivienda nueva en la zona de Carlos de Haya. "Cerca del Parque del Norte tiene usted su casa", dice con generosidad quien ha pasado 46 años de su vida en este barrio de Málaga. 

Pese a tener que abandonar el lugar en el que se crió ("Mi madre me trajo con 2 añitos", comenta), en el que nació su marido y donde trajo al mundo a sus dos hijas, se muestra ciertamente satisfecha con el paso dado. 

En sus palabras y en sus gestos se le ve feliz. "Yo estoy muy contenta. Hemos luchado mucho y hemos pasado mucho sufrimiento, muchas irritaciones, pero lo hemos conseguido", dice con convencimiento.

Cuando hace algo más de dos años Dazia irrumpió en sus vidas, haciéndose con la propiedad de varios edificios de Callejones del Perchel, Malpica, Montalbán…, a Carmen y a otros muchos residentes les entró el miedo de quedarse en la calle. "Creíamos que nos íbamos a quedar en la calle después de tantos años", confiesa. Ahora celebra con sus vecinos de toda la vida el acuerdo alcanzado.

"Me he tirado cerca de 50 años en esta casa y no estoy arrepentido, esto se está muriendo; esto va a ser para los turistas"

Miguel, vecino de El Perchel

"Mi niño nació aquí, lo echo de menos, pero nos teníamos que ir", explica María Victoria, que llevaba 40 años en el barrio, que se ha ido a vivir al Parque del Sur. Mientras habla, irrumpe por lo bajo Miguel, que acompaña a su mujer en silla de ruedas. "Me he tirado cerca de 50 años en esta casa y no estoy arrepentido, esto se está muriendo. Esto va a ser para los turistas. Y ahora vivo en un barrio de jóvenes", relata.

Enrique Gutiérrez permanece en El Perchel tras casi 40 años. Está a la espera de una vivienda social de la Junta de Andalucía en El Perchel Norte. Ha sido una de las caras visibles de la lucha de los vecinos, que ha permitido allanar el acuerdo final. "Cuando empezó todo no esperábamos este final, la cosa pintaba muy mal, pero hay que ser justos. Todos los de renta moderna terminábamos contrato y teníamos que pelear para no vernos sin nada", explica, poniendo en valor el papel de la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía (AVRA).

Representantes de Dazia, en la entrada de la Peña Perchelera.

De los 50 inquilinos originales de El Perchel, 13 de ellos con contratos de renta antigua (blindados por ley) y de renta moderna, quedan tres residentes que han rechazado la propuesta económica de Dazia. A la espera de nuevos acontecimientos, tienen derecho a permanecer en sus viviendas, aunque todo hace pensar que pueda haber un cambio de posición una vez las máquinas inicien la demolición de los bloques ya desocupados.

¿Cuándo se va a dar ese paso? Leticia Pérez es Managing Director de Dazia, que, junto a Daniel Martín, propietario de la promotora, han acudido este martes al encuentro con los vecinos. Por el momento, según admite, no se pueden ofrecer nuevos detalles sobre la operación futura. Sí se sabe que el desarrollo permitirá del orden de 200 viviendas de nueva construcción, quedando a la espera de determinarse si en alquiler o en venta.

"Estamos a la espera de que el Ayuntamiento apruebe definitivamente el estudio de detalle, en estos meses desarrollaremos el proyecto básico", explica Pérez, quien se muestra satisfecha por el resultado del largo proceso negociador. "Han llegado a buen puerto y ha sido posible el acuerdo con los vecinos", ha destacado, subrayando el papel de Francisco Gutiérrez, de la Junta y del Ayuntamiento.

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