Las numerosas quejas que desde hace semanas vienen realizando vecinos del barrio de La Roca, localizado en el distrito Palma-Palmilla de Málaga y a escasos metros del campo La Rosaleda, empiezan a tener respuesta por parte de las Administraciones públicas. El último en mostrar su comprensión con la situación de estos residentes, que padecen importantes problemas de ruido e inseguridad los días en los que el Málaga C. F. disputa partido en su estadio, es el subdelegado del Gobierno en la provincia, Javier Salas.
En un encuentro mantenido con representantes vecinales y al que han asistido responsables de la Policía Nacional, Salas se ha comprometido a mantener los dispositivos de seguridad de la Policía Nacional para velar por la seguridad ciudadana durante las concentraciones de ultras que se produzcan en esta zona de la ciudad.
A modo de ejemplo sirva recordar el operativo desplegado el pasado domingo, que contó con agentes de la UIP y de la UPR de la Policía Nacional. Durante su intervención, levantaron 9 actas de sanción, 5 por tenencia de armas, 3 por drogas y 1 por desobediencia.
El subdelegado del Gobierno ha lamentado que desde el Ayuntamiento se haya trasladado a los vecinos que es un asunto que sólo compete al Gobierno de España. "El Gobierno de España está actuando y lo que debería hacer el alcalde es implicarse, no ponerse de perfil, y poner todos los medios de su competencia para garantizar la convivencia y el bienestar de los vecinos de La Roca", ha apostillado.