El anunciado cierre del Colegio Infantil Adelfa para el curso que viene como consecuencia de las futuras obras del Metro de Málaga, en su prolongación hacia el entorno del Hospital Civil, obliga a poner la lupa sobre el incuestionable impacto que una obra de estas características, que incluye la construcción de un túnel de 1,8 kilómetros, va a tener sobre los edificios que se levantan a escasa distancia del futuro trazado.
Asumida la afectación que la ejecución del paso soterrado puede tener sobre los inmuebles del entorno directo, el proyecto que sirve de base para el desarrollo de las obras, ya en la calle Hilera, incluye entre sus numerosos anejos uno relacionado exclusivamente con el estado en el que se encuentran parte de las edificaciones localizadas en Hilera y Avenida de Andalucía, la calle Sante Elena, Eugenio Gross y Blas de Lezo, como ejes afectados por el recorrido del suburbano.
La experiencia ya acumulada en escenarios altamente densificados como Carretera de Cádiz y la calle La Unión, en el marco de la línea 2, sirve de modelo a seguir ahora en el salto que se pretende dar hacia la zona norte. Son por ello ciertamente relevantes las conclusiones recogidas en el proyecto firmado por EIS GUIA Consultores y TPF Getinsa Euroestudios.
Conforme a los análisis de campo e inspecciones realizadas por los técnicos, en la traza dibujada para extender el Metro hasta el Civil hay 22 edificios, incluido el Adelfa, que presenta un grado de vulnerabilidad alto. Esto hace que, a ojos de los técnicos, sean inmuebles con una "probabilidad alta de ser afectados por las obras del Metro".
El valor añadido de esta labor de inspección es que permite activar cuantas medidas sean precisas para minimizar y anular esta afectación. Para evitar crear alarma social y vecinal, omitimos las direcciones concretas de estas construcciones. Sí podemos señalar que en su mayoría están localizadas en la calle Eugenio Gross.
Acudiendo siempre al Inventario de Edificios del proyecto, en esta calle se han registrado 17 edificios con una vulnerabilidad alta (en su mayoría edificios de viviendas con entre 52 y 78 años de antigüedad, sin plantas bajo rasante y muy próximos a la traza del Metro), a las que sumar otros 23 con vulnerabilidad media.
La incidencia en el resto de calles es sensiblemente menor. Así, en la Avenida Andalucía, los dos únicos edificios inspeccionados presentan una vulnerabilidad baja; en Hilera la vulnerabilidad detectada es entre baja y media, "ya que la mayoría disponen de plantas subterráneas o están suficientemente alejadas del túnel".
En la calle Santa Elena, los inmuebles tienen una vulnerabilidad entre baja y media, "excepto tres edificios cuya estructura son muros de carga y tienen una vulnerabilidad alta por su cercanía a la traza". En Blas de Lezo, la vulnerabilidad de los edificios estudiados es entre baja y media, salvo dos edificios, en los que es alta. Y en la Avenida Simón Bolívar, sólo se detectó uno con vulnerabilidad alta.
El propio informe técnico indica que en los casos en los que la posibilidad de que los inmuebles sufran daños durante la fase de construcción del ferrocarril urbano se hace necesario "un estudio detallado que determine la conveniencia de la adopción de medidas preventivas que preserven su seguridad".
Se hace mención expresa al Colegio Adelfa, hasta el punto de asegurarse que presenta "anomalías relacionadas con posibles asientos diferenciales o descalces de la cimentación" y se asegura que estaba ya prevista su reparación estructural por parte de la Junta de Andalucía.
Los estudios mencionados deben incluir las actuaciones que en cada caso se consideren oportunas para la consecución de los objetivos descritos (caracterización de la cimentación, estudios geotécnicos, caracterización de los materiales, etc.) y deben realizarse con antelación al comienzo de las obras. De hecho, se trata de una fase de la actuación ya realizada por Sando y Kerkros en el tramo del que son adjudicatarios, el que se extiende entre la estación Guadalmedina y la calle Hilera.
Es, además, un procedimiento que habrán de realizar las futuras adjudicatarias de las otras dos piezas en las que ha sido dividido el trazado al Civil. La intención de la Junta es la de activar la contratación del segundo subtramo, Hilera-La Trinidad, el próximo mes de junio, mientras que el tercer subtramo, La Trinidad-Hospital Civil, se quiere dar a inicios de octubre.
En total, la empresa responsable del proyecto constructivo reconoce la revisión de un total de 117 edificios en todo el recorrido, destacando 55 en Eugenio Gross; 21 en Blas de Lezo; 13 en la Avenida Simón Bolívar; 14 en la calle Santa Elena; 12 en la calle Hilera, y solo dos en la Avenida de Andalucía.