Cada 8 de septiembre, Málaga capital se viste de gala para ver a su patrona, la Virgen de la Victoria, recorrer las calles de su ciudad rodeada de sus devotos. Además, este año la salida procesional es mucho más especial porque es el pistoletazo de salida de la celebración de su Año Jubilar por el 150º Aniversario de la Hermandad. 

Para celebrar el día de la Patrona de Málaga, la jornada empezará en la Catedral de Málaga con una misa oficiada por el obispo Jesús Catalá y a las 19.30 horas empezará el cortejo procesional por las calles de Málaga. 

Cuenta la historia que la Virgen de la Victoria llegó a Málaga en 1487 de la mano del rey Fernando el Católico. La imagen habría sido un regalo del emperador Maximiliano I de Austria y, según la leyenda, estuvo presente en el campamento de los Reyes Católicos en el cerro donde ahora se encuentra el Santuario de la Virgen de la Victoria.

Después de la reconquista, los Reyes Católicos donaron la imagen a la ciudad como muestra de gratitud y devoción, colocándola en un templo que más tarde se convertiría en el santuario que lleva su nombre. Desde entonces, la Virgen de la Victoria se ha convertido en una figura importante para los malagueños, especialmente en tiempos de necesidad.

De esta manera, la procesión saldrá desde el Patio de los Naranjos de la S.I. Catedral a las 19.30 horas. Después, seguirá por Santa María, Molina Lario, Plaza del Obispo, Molina Lario, Strachan, Torre de Sandoval, Bolsa, Marqués de Larios, Plaza de la Constitución (retirada autoridades y de Banda Municipal), Granada, Calderería, Plaza Uncibay, Casapalma, Cárcer, Madre de Dios, Plaza de la Merced (oeste y norte), Victoria, Plaza Victoria, Compás Victoria, Plaza del Santuario y finalmente, sobre las 23.30 horas, aproximadamente, estará en su templo. 

En cuanto al acompañamiento musical, en la cabeza de la procesión estará la Banda de Cornetas y Tambores del Real Cuerpo de Bomberos de Málaga. Así, a lo largo del cortejo estará la Banda Municipal de Málaga y finalmente, tras el trono de la Virgen, se encontrará la Banda de Música ‘Maestro Eloy García’ de la Archicofradía de la Expiración. 

El repertorio que se interpretará este año tras la Virgen de la Victoria, según han explicado desde la propia Hermandad, seguirá el corte tradicional que la imagen demanda con una clara presencia de marchas propias, dedicadas a imágenes de la Diócesis de Málaga, de marchas eucarísticas y triunfales que marca el tiempo en el que se enmarca la salida procesional y de algunas composiciones clásicas andaluzas. 

El cortejo irá formado por representaciones de diferentes estamentos de la ciudad, donde estarán instituciones y asociaciones de la ciudad; Hermandades y Cofradías de Pasión y Gloria; Agrupación de Cofradía de Semana Santa y Agrupación de Gloria; Autoridades civiles y militares, entre ellas los HM honorarios de la Hermandad; Ayuntamiento de Málaga y Diputación Provincial que asisten corporativamente; Clero, Cabildo Catedral y el obispo de la Diócesis; tramo de cirios de hermanos y devotos y consejo y Junta de Gobierno de la corporación. 

En relación a sus estrenos, cabe destacar que lleva un nuevo techo para el templete del trono de la Virgen. La Hermandad explica que el motivo de la obra es la paloma en representación del Espíritu Santo. Para confeccionarlo en el taller de bordados de la Hermandad dirigido por Sebastián Marchante se han utilizado para los ojos, picos y patas de la paloma hilo de seda, para la paloma hilos de plata entrefino con técnica de cetillo y cartulina y para los rayos hilo de oro con técnica a media onda con torzal y cartulina. 

El templete de la Virgen de la Victoria

La pieza llegó a Málaga en 1945, a instancias del obispo Balbino Santos Olivera, procedente de la iglesia del extinto Convento de Santo Domingo de Archidona cerrada al culto. Se trata de un templete dorado y policromado realizado hacia 1763, que presidía el retablo de la Virgen del Rosario. 

El templete ha desempeñado diferentes funciones a lo largo de la historia, tanto a nivel expositor durante la novena 2019 como a nivel procesional en las décadas de los 50 y 60 del siglo XX. 

La necesidad de dotar a la imagen de la Patrona de Málaga de un trono acorde a su prestancia, dignidad y categoría artística justifica este proyecto. El templete ha venido contribuyendo a realzar y configurar visualmente la imagen icónica de la Patrona, hasta convertirse en un elemento indisociable de la misma.