Hay proyectos arquitectónicos e inmobiliarios capaces de marcar un antes y un después en el lugar donde se asientan. Y eso es justamente lo que pretende SUBA, el brazo promotor del malagueño Grupo Sinerba, con el singular proyecto residencial planteado en uno de los emplazamientos más populares de Málaga: la Plaza de las Cuatro Esquinas de El Palo.
La operación, que puede suponer una inversión de unos 6,5 millones de euros, adquiere el reto de intervenir sobre una zona ciertamente consolidada y tradicional. Razón de más para que el colorido con el que juega el diseño de la edificación resulte mucho más llamativo.
Grosso modo, la apuesta de la empresa es la de plantear un edificio "emblemático e icónico" con el que "enriquecer la escena urbana a través de su uso mixto: comercial y de alojamiento turístico". El modelo inicialmente manejado es el de habilitar un complejo de apartamentos turísticos de 2 llaves, con capacidad para 30 unidades pensadas para entre 2 y 5 personas.
Conforme a los detalles conocidos por EL ESPAÑOL de Málaga, el diseño aumenta ligeramente la superficie exigida por la normativa para estos apartamentos, garantizando una versatilidad única en el proyecto, que va a ser objeto ahora de un proceso de búsqueda de inversores interesados.
SUBA ya dispone de licencia de obras para poder afrontar la actuación, estando previsto que los trabajos puedan arrancar antes de final de año. La terminación del edificio se fija para el cuarto trimestre de 2026, según confirma el director general de la entidad, Bartolomé Inglés.
El edificio se organiza en tres niveles: la parte pública, la zona privada y la cubierta. Los usos comerciales vinculados a la calle y que constituyen la fachada más reconocible en la escala próxima se ubican en planta baja y primera.
En planta primera el uso público ocupa el interior de la manzana apareciendo un patio que funciona como terraza exterior de la cafetería ubicada en el frente de la parcela. A partir de la planta segunda y hasta la sexta se desarrolla el programa de alojamiento turístico.
Piscina y solarium
El inmueble se completa con una cubierta con dos niveles de altura, en la que los clientes dispondrán de terraza solárium y piscina, así como de un espacio reservado para un roof top bar.
El diseño arquitectónico presta especial atención a las condiciones climáticas del edificio, incluyendo protección de los espacios a la radiación solar directa, se usarán colores claros en fachadas y cubiertas, se usarán fórmulas para mejorar las características térmicas de la envolvente… Otro factor importante a utilizar es la ventilación, garantizando que todos los apartamentos dispongan de ventilación cruzada.
"Se ha proyectado un edificio de muy bajo consumo energético, con un impacto mínimo sobre el medio ambiente, y centrado en la salud y el bienestar de los ocupantes, que busca la máxima puntuación de las certificaciones LEED y WELL, así como el cumplimiento de la nueva directiva referida a edificios nZEB (Nearly Zero Energy Building)", se remarca.