Publicada

La gran operación hotelera que empieza a tomar forma en la frontera de Málaga con Torremolinos adapta su desarrollo futuro a los condicionantes ambientales de los terrenos sobre los que se asentará. Los actuales promotores de la iniciativa, la empresa Milestone Real Estate, S. L., optan en la última versión del plan parcial de La Cizaña por evitar futuros conflictos con la Junta de Andalucía y liberan de cualquier edificación la parte de la finca más sensible desde el punto de vista ecológico.

Hay que recordar que años atrás la Consejería de Sostenibilidad puso serios reparos a este importante desarrollo, alertando del impacto negativo que podía tener sobre el sapo de espuelas, que tiene en este punto uno de sus tres núcleos poblacionales, y el Muscari parviflorum, taxón perteneciente a la familia de las asparragáceas y con la singularidad de presentar floración otoñal.

Con este precedente, la propuesta ahora objeto de tramitación opta por incrementar sustancialmente el suelo reservado para espacios libres, que pasa de los 65.000 fijados en la ficha del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) a los algo más de 96.000 ahora recogidos en la alternativa de desarrollo elegida.

El documento, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL de Málaga, remarca que en los espacios libres y zonas verdes se plantarán árboles de hoja caduca para generar sombra en verano y permitir la incidencia solar en invierno, logrando así un mayor confort térmico para cada estación del año. Asimismo, se plantará vegetación arbustiva autóctona de la zona que se mantenga con poca agua, evitando el exceso de este bien en riegos innecesarios.

Ordenación de los terrenos de La Cizaña.

 

Aunque los espacios libres vienen a copar del orden del 42% del sector, que dispone de un sector de 228.075,99 metros cuadrados, la actividad central es la hotelera. Sobre el sector de La Cizaña, situado a pocos metros de Guadalmar, se autoriza un techo edificable de 36.687,84 metros cuadrados para este fin (sobre un terreno de 39.598,84 metros cuadrados). La altura máxima permitida será de dos plantas, siendo 8,5 metros de altura de cornisa y 11,50 metros de altura de coronación. 

El doble que el edificio de Correos

Para tomar una dimensión adecuada de la envergadura de este techo sirva recordar que es el doble del techo del futuro hotel de Correos, o muy semejante al previsto para la Torre del Puerto, donde se plantean del orden de 370 habitaciones. 

A este uso hay que agregar la disposición de 14.381,99 metros de suelo para comercial, con un techo de 9.283 metros cuadrados, al otro lado de la autovía. Asimismo, se disponen 20.578 metros de uso empresarial productivo (13.000 metros de techo), y 21.119,86 metros de equipamiento comunitario público.

En los documentos técnicos se incide en que la ordenación elegida propone la menor urbanización posible y concentrando los espacios libres en las zonas con mayor sensibilidad ambiental. A su vez, se señala la necesidad de ejecutar pavimentos blandos de cara a reducir el impacto térmico de la superficie transitable.

Los espacios libres se regarán mediante el reciclado del agua utilizada en el uso hotelero, reduciendo el coste económico y ecológico del uso de agua potable. Se promoverá el compostaje de los residuos orgánicos generados por la poda de parques y jardines.