La Navidad es la época del año en la que la ilusión y la esperanza se respira en el ambiente. Las luces festivas, el frío y los deseos se convierten en los protagonistas de cada calle y en Málaga entre tanto alumbrado, hay uno especial. Se trata del Árbol de la Ilusión, un árbol de Navidad que lleva diez años cumpliendo los deseos de los malagueños y visitantes que pasan por la calle Molina Lario.
Durante estos días, pedir deseos es una tradición para muchos, ya sea para ellos mismos, para sus familiares o para los más necesitados. Con estos últimos en mente, el Club de Leones Málaga Ilusión se convierte en un referente solidario, donde quien lo desee puede dejar un mensaje a cambio de un donativo en beneficio de aquellas familias con dificultades económicas.
Cada deseo es diferente, pero pese a que hay algunos que se repiten, hay otros que destacan por su originalidad. Unos piden “un 2025 lleno de tranquilidad, paz, salud, mucho amor y buenas notas”; otros desean “comida para los de Valencia y Andalucía” y algunos quieren que “el Málaga CF ascienda a 1ª división”.
“Trabajamos todo el año ayudando a quienes más lo necesitan tanto con ropa, como con comida, pero el mes de diciembre lo dedicamos exclusivamente a los niños”, asegura Mari Ramírez, presidenta del Club de Leones Málaga Ilusión.
Llevan 10 años con el Árbol de la Ilusión en la calle Molina Lario. Durante las fiestas recaudan dinero, gracias a las donaciones que les dan todos los que dejan sus deseos en el árbol, y lo destinan a hacer feliz a los más pequeños.
“Se inaugura con el alumbrado navideño y se va llenando de deseos de los malagueños y extranjeros que llegan de todas partes”, explica Ramírez. Además, añade que, tras una década a los pies de este árbol, han observado que cada año acuden familias enteras a repetir. “Vienen a dar las gracias porque su deseo se ha cumplido”, señala.
En cuanto a los deseos, sostiene que están emocionados porque la solidaridad sale a relucir en los mensajes, tanto de los mayores como de los más pequeños. "Vemos como los niños piden deseos para los afectados de la Dana” y es que parte de los juguetes que recauden en este año irán para los damnificados de Valencia.
Este Árbol de la Ilusión se encendió el pasado 29 de noviembre y continuará alumbrado hasta el 2 de enero. “Te vas cansada después de muchas horas pasando frío, pero vuelve a casa feliz porque sabes que estás ayudando a los más pequeños”, zanja Pepi González, vicepresidenta del club.