La 'tardebuena' ha llegado para quedarse a Málaga. Así lo creen los hosteleros y la propia ciudadanía, que cada vez se anima a salir más a la calle en el almuerzo del 24 de diciembre para celebrar las fiestas y, por qué no, la vida, con los amigos y la familia.
Javier Frutos, presidente de Mahos asegura que este fenómeno lleva ya bastantes años haciéndose notar en la capital, pero también en pueblos de la provincia, donde ya era típico esto. "La gente aprovecha el mediodía para quedar con esas personas con las que no te vas a juntar por la noche para tomar algo. Está cogiendo auge en los últimos años y más si cae entresemana", sostiene.
Muchos malagueños aprovechan que salen del trabajo a la hora de comer para pasar unas horas con los compañeros y amigos antes de marcharse a casa. Si la Nochebuena cae en fin de semana, ya suele darles "más pereza" porque tienen que salir del hogar solamente para eso, según explica Frutos.
¿Y quiénes son los mayores beneficiados de este nuevo fenómeno de ocio? Sin duda, los bares de 'tapeo', aunque también los restaurantes más tradicionales. El cocinero Pachu Barrera, por ejemplo, explica a EL ESPAÑOL de Málaga que tanto en Taró como en La Caverna, los dos locales que tiene en el barrio de Huelin, se prevé una amplia presencia de público.
Si bien, indica que el perfil del cliente en cada uno de los establecimientos es distinto. Cuenta ya con bastantes reservas de familias en el restaurante Taró, pero cree que en La Caverna, más enfocado a tomar una cerveza junto a unas tapas, será más visitado por grupos de amigos que se reúnan de "última hora" este mediodía del 24 de diciembre.
"Pensamos en hacer algo especial, como poner actuaciones, pero nos dimos cuenta de que la gente tampoco se recrea mucho, porque se quieren ir luego a casa a ayudar a preparar la cena", dice Barrera, que añade que lo que no faltarán serán sus guisos, como el gazpachuelo o los callos. Además, siempre suelen brindar todos los trabajadores con los clientes antes de marcharse a casa a celebrar la Nochebuena.
Su caso demuestra que no solo se vive la 'tardebuena' en el Centro de Málaga. Los barrios son un hervidero de gente año tras año en estas fechas tan señaladas. En el Centro, restaurantes como Kaleido, en el Palmeral de las Sorpresas, han preparado expresamente incluso una fiesta de 'tardebuena' a partir de las doce del mediodía, con una paella gratis y 'ambientazo' gracias a las buenas vibras de los DJ Vico y Gago.
En el barrio de San Andrés, las 'tardebuenas' se disfrutan a ritmo de carnaval, ese que lleva en la sangre la familia que regenta el bar Susi, ubicado en la calle Puerto Oncala. Un aficionado carnavalero y también hostelero, Carlos Pasky, suele acudir allí en los últimos años cada mediodía de Nochebuena.
"Hay un ambiente muy familiar. Unos pican, otros no; unos llegamos más temprano; otros pasan más tiempo... Pero hay un ambiente familiar y, sobre todo, carnavalero, como siempre. Se pueden juntar ochenta personas allí charlando. Cuando la cosa se anima, hasta alguno canta canciones de carnaval, villancicos... Una pasada", relata.
El propio Pakito Susi explica a EL ESPAÑOL de Málaga que uno de los días más especiales en su bar son sin duda los 24 de diciembre. "Se mezcla la Navidad con el carnaval, es algo muy bonito", dice, "ya que se cantan villancicos y cuplés, pero también pescaíto y turrón".
Así, confiesa que el brindis más "potente" se hace con un chupito de ingredientes secretos. "Nadie más que yo sabe la receta. Es de color rojo", cuenta entre risas Susi. "Se mezclan clientes habituales con componentes de muchas agrupaciones de carnaval. Por citar algunas, los Emeterios, la comparsa de los niños, la murga de San Andrés, la murga del Chino, la gente de mi murga... Amistad, Navidad, Carnaval y una tarde buena en familia", indica.
Aunque hay quien no entiende a quién le puede dar tiempo a salir de tapas y copas en una fecha tan señalada como el 24 de diciembre, otro grupo, donde entra Carlos, se declara fiel defensor de la 'tardebuena'. Es el caso también de Manuel García, un joven malagueño de 23 años que no dudará en echarse a la calle al mediodía del próximo martes.
"Nos encanta reunirnos todos los amigos y además aprovecharemos para hacer un amigo invisible al solecito. Esperemos que haga buen tiempo y podamos disfrutar juntos", declara a EL ESPAÑOL de Málaga el chaval, que cree que junto a su grupo optarán por salir al Centro de Málaga, donde cuentan con una "amplia oferta" que les facilitará encontrar el local perfecto para cumplir su cometido.
Por su parte, el malagueño Miguel Díaz también ve en la 'tardebuena' una cita incancelable con sus compañeros del equipo de hockey. "Vivimos cada uno en una punta, pero el meeting point es siempre un bar en Carranque. Una Nochebuena sin mediodía-bueno y 'tardebuena' no es un día, es una penuria", dice entre risas.
Ojo, que Díaz subraya que "da tiempo a todo", que él y sus amigos también cumplen "formalmente" en casa con toda la familia. "Nuestras parejas, ajenas a todo, vienen y forman parte de ese día en el que tú sabes que llegas a las 12 de la mañana a ese bar determinado y no sabes ni quién va a haber ni nada, pero sabes que tienes que estar: van llegando, van viniendo, se van yendo", confiesa.
Entiende que hay gente que viva la Nochebuena como "algo muy familiar", pero para él, por circunstancias, siempre ha sido un día muy triste. A él "la alegría" se la dan sus "colegas". "Es verdad que algún año igual se va de madre todo y llega uno a la cena pues... Ya se sabe. Pero oye, que tampoco hay nada escrito acerca de lo que uno debe ser, ¿no? Que el concepto de todo el mundo alrededor de la mesa con el especial de Raphael, igual ya está un poco manido. Al final, es un día más, pero un festivo especial. Sabemos lo que pasa y qué mejor que pasarlo con tu gente. Como se suele decir, aunque sea una ñoñería, los amigos son la familia que uno elige", zanja.