Tras la tempestad, la calma y el buen tiempo. Esta es la transición que ha vivido el puerto de Málaga en 2024, tras un año, 2023, azotado por los malos vientos de la crisis internacional de Ucrania y la tardía recuperación de China. El impacto negativo de ambos episodios provocó una caída considerable en el tráfico de contenedores, una situación que ha revertido por completo en 2024.
Así queda constatado en el balance anual presentado este martes por el presidente de la Autoridad Portuaria, Carlos Rubio. Las estadísticas oficiales ponen en valor el espectacular incremento de operaciones en materia de contenedores, que ha sido "la estrella".
El puerto cerró el año pasado con 2.569.830 toneladas de contenedores, lo que supone un 730,8% más que en 2023, cuando apenas se movieron 309.314 toneladas. De acuerdo con las estadísticas oficiales, es el mejor ejercicio desde 2018.
Sin duda es un valor que incide de manera más que positiva sobre el balance total de toneladas movidas por el recinto portuario malagueño. En términos absolutos, el pasado ejercicio fueron en total 4,5 millones, lo que implica un 76,4% de incremento sobre 2023.
"Hemos tenido un año de récord, desde hace muchos no teníamos estas cifras", ha reflexionado en términos generales, incidiendo en que actualmente hay cinco líneas de tráfico permanente. Rubio ha subrayado que estos datos permiten concluir que el de Málaga ha sido el puerto de España con mayor crecimiento.
Esto supone una variación más que significativa, dado que el año pasado se cerró con una caída en el tráfico del 42%. Esto hace que el de Málaga se coloque como el puerto con mayor crecimiento de toda España.
En materia de tráficos es igualmente reseñable el comportamiento positivo registrado en la importación de vehículos. En total han sido 86.466 unidades, casi un 32% más que en 2023. "Nunca antes se habían gestionado tantos", ha destacado Rubio, quien ha resaltado que desde hace varios años Málaga se ha convertido en un hub de vehículos.
"Hay una enorme competencia en este tráfico, porque las marcas oroductodas exigen unas condicines mínimas, que hace que el de álaga sea un puerto muy apreciado", ha remarcado.
El otro lado de la moneda lo representan los tráficos de graneles sólidos, con un -6,8% (fundamentalmente del agro) y líquidos (-18,5%). En este último apartado, no obstante, destaca el crecimiento del aceite, con un 20% de subida.
Caída en los cruceros
En materia de pasajeros, Rubio ha destacado el comportamiento de la línea Málaga-Melilla, que ha contado con 362.733 pasajeros y 81.148 vehículos en régimen de pasaje, lo que supone una subida del 3,1% y del 7,9%, respectivamente.
Por el contrario, 2024 ha cerrado con una bajada del 6,7% en el número de pasajeros de cruceros, con un total de 469.949. En la misma medida, han descendido las escalas de cruceros un 7,9%, con un total de 278. En 2023 fueron 300.
"En realidad hemos empatado con el año anterior; la bajada se explica en las circunstancias geopolíticas, que hicieron que en el primer trimestre perdiésemos diez escala de una sola compañía debido a la guerra en la franja de Gaza, y se cancelaron otras escalas por la dana", ha expuesto. Y la previsión en 2025 es que estas cifras se incrementen de manera notable.
Como consecuencia del buen comportamiento general, los resultados económicos presentados son favorables. En concreto, los ingresos de explotación alcanzan los 20,4 millones de euros (la cifra más alta desde 1999), con unos resultados positivos de 3 millones. Es algo más de un millón de diferencia sobre 2023.
De los ingresos, el 21% se corresponde con los cruceros; el 15% con las líneas regulares con el norte de África; el 13% con los graneles sólidos; un 11% con la operación puerto-ciudad, y un 10% con los contenedores. Igualmente importante es que el 10% de los ingresos proceden de la náutica deportiva.