Imaginen un lugar donde pueden ir a la barbería, subirse a un ring de boxeo, acudir a una sala de masaje particular, entrar en una bodega de vinos, disponer de una cava de cigarros, subir a su casa en ascensor privado… Un lugar donde sus hijos reciban clases particulares, puedan ir de acampada sin necesidad de salir de la urbanización; donde cuando esté tumbado junto a la piscina tenga a mano su propia heladería en formato food-truck al más puro estilo italiano. Y todo eso mirando al mar Mediterráneo y rodeado de la exclusividad que aporta el diseño de uno de los más icónicos estudios de moda, el de Dolce y Gabbana.
Pues eso es justamente lo que van a poder vivir en primera persona los compradores de los lujosos apartamentos que desde hace varios meses vienen comercializando la firma de moda y la promotora Sierra Blanca Estates. El proyecto, que supone el primer desembarco inmobiliario de la marca con sede en Milán, tiene todos los ingredientes para convertirse en uno de los grandes referentes nacionales e internacionales de las denominadas branded residences.
Un sector en el que la Costa del Sol se ha posicionado como gran epicentro europeo. Muestra de ello es que este territorio, incluyendo la provincia de Cádiz, acoge el 75% de los proyectos de gran lujo que se acometen en el continente, con un total de 485 unidades de branded residences.
Los precios de los apartamentos de esta promoción oscilan entre los 4 millones de los más económicos y los 20 millones de los más caros
Los detalles marcan hasta el extremo el carácter único de esta promoción. Y eso se paga caro. La horquilla de precios de los apartamentos va de los 4 millones de euros a algo más de 20 millones, según los datos conocidos por EL ESPAÑOL de Málaga. Pese a lo elevado del montante, la realidad es que de los 92 inmuebles que componen el complejo, ya hay enajenados 35 unidades, con un valor global de 250 millones de euros. Tomado como referencia esta relación, el precio medio ya pagado es de unos 7 millones de euros por vivienda.
Según la información trasladada por los actores principales de la operación, lo que ya ha sido vendido está en manos de "clientes VIP internacionales" de Dolce & Gabbana y compradores ya fidelizados por Sierra Blanca Estates en otras operaciones. Es tal el vínculo de estos clientes con ambas entidades que alguno de ellos han viajado con Sierra Blanca Estates a Milán "para conocer desde dentro la marca, estar en el front-row de sus desfiles, ver cómo trabaja el equipo creativo italiano en el diseño de los detalles de las casas".
"Eso es algo que no sucede en ningún otro caso cuando se adquiere una vivienda de lujo", ponen en valor fuentes conocedoras de la operación, que inciden en la apuesta de la promotora marbellí por "crear un vínculo que va más allá de lo material, del producto; lo que hace es que el cliente sienta que está pagando por una inmersión total en el universo de quien concibe su nuevo hogar, de la mano de quien lo promueve y comercializa".
Abierta comercialización
Cerrada esta primera fase de venta preferente, las dos entidades ponen en marcha la comercialización del producto restante al público en general. El calendario manejado apunta a la finalización de todo el complejo, que se asentará sobre una parcela de 90.000 metros cuadrados, en 2026. Para hacerlo posible, el objetivo es arrancar las labores de edificación en el otoño del 2024, incluyendo la primera fase del proyecto, dando forma a la vivienda piloto a lo largo de 2025.
Los servicios planteados en Design Hills Dolce & Gabbana Marbella son los propios de un hotel de lujo. De hecho, a todas las curiosidades ya apuntadas hay que sumar que los futuros propietarios podrán disfrutar de instalaciones deportivas de alto rendimiento, con pistas de pádel, un centro de fitness, un gimnasio de madera al aire libre, zonas exclusivas para meditación, yoga y pilates, simuladores de golf, canchas de baloncesto cubiertas y el primer campo de fútbol de césped artificial 5x5 cubierto de Marbella.
El complejo también contará con su propio SPA equipado con un centro de bienestar, circuito de aguas, centro de belleza, peluquería y barbería. Los residentes serán miembros del club privado donde el equipo de hospitality del proyecto desarrollará una exclusiva gama de servicios en las múltiples instalaciones tales como: sala de cine; bar y zona de cócteles; bodega de vinos y cava de cigarros; salas privadas de reuniones y conferencias equipadas con pantallas; zona de biblioteca y salas polivalentes para acoger celebraciones y eventos privados.
Design Hills también atenderá las necesidades de los más pequeños de la familia albergando su propio Kids Club con ludoteca, aulas educativas y clases particulares, una zona de juegos interior y exterior totalmente equipada, e incluso su propia zona de acampada. Y no se olvidan de las mascotas, creando un conjunto de zonas para el paseo de perros, así como áreas para el avituallamiento de mascotas y espacios para su cuidado.
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