Julián Muñoz, en el banquillo de los acusados por el 'caso Malaya'.

Julián Muñoz, en el banquillo de los acusados por el 'caso Malaya'. Efe

Marbella

Julián Muñoz, el exalcalde de Marbella icono de la corrupción y la prensa rosa

Comenzó como camarero, y acabó consiguiendo la vara de mando de la ciudad. La Costa del Sol fue durante más de treinta años el refugio del exalcalde, pero también su cárcel.

24 septiembre, 2024 10:43

Julián Muñoz nació en Ávila, pero su vida quedará ligada para siempre a la historia de Marbella. Comenzó como camarero, y acabó consiguiendo la vara de mando de la ciudad. La Costa del Sol fue durante más de treinta años el refugio del exalcalde, pero también su cárcel.

Fallecido este martes a los 76 años, Muñoz será recordado como uno de los iconos de la corrupción en Marbella. Ya es historia de la televisión su famosa relación con la cantante Isabel Pantoja, que lo llevó a protagonizar las portadas de todas las revistas de prensa rosa.

A finales de los años 70, Marbella fue el lugar escogido por Julián Muñoz y su entonces esposa, Mayte Zaldívar, para empezar una nueva vida lejos de El Arenal, su pueblo natal. Tras probar suerte en la hostelería, el empresario consiguió una oportunidad de oro que lo marcaría para siempre.

Tres letras le cambiaron la vida. Aunque Muñoz fue afiliado del PSOE durante unos años, su verdadera incursión en política llegó en 1991 de la mano del Grupo Independiente Liberal (GIL), presidido por el polémico Jesús Gil, de quien llegó a ser mano derecha.

El exedil se convirtió en el mayor escudero de Gil, que por aquel entonces ya era el alcalde más mediático de España. En las municipales de 1995 y 1999 repitió como concejal. Ya era el número dos del partido.

Ascenso a la alcaldía

Ese fue su trampolín para acceder a la alcaldía. En 2002, Julián Muñoz se convirtió en alcalde accidental tras la inhabilitación de Gil por el 'caso Camisetas', y las urnas lo respaldarían al año siguiente en las municipales de mayo de 2003, con mayoría absoluta.

Ese mismo año, la trayectoria política del alcalde se enlazaría con los focos de la prensa rosa al conocerse su relación con la cantante Isabel Pantoja. Era habitual ver a la pareja por las calles de Marbella y en múltiples eventos.

La condena de Muñoz fue su propio partido. Su mentor Gil no estaba dispuesto a dejar de ser el alcalde en la sombra y acabó convirtiéndose en su mayor enemigo. 

El 13 de agosto de 2003, pocos meses después de las elecciones, el entonces alcalde fue desbancado como primer edil al prosperar una moción de censura orquestada presuntamente por Juan Antonio Roca: después resultó ser el cerebro del caso Malaya, la trama de corrupción que saqueó Marbella.

Tras la moción, muchos vieron la mano de Gil, quien se enzarzó al día siguiente en un intercambio de graves acusaciones con Muñoz en un programa de televisión. Ese fue el comienzo de una larga investigación judicial que acabaría destapando uno de los casos de corrupción más importantes del país.

A partir de entonces, la vida de Muñoz cambió para siempre. Fue detenido en julio de 2006 en la segunda fase del caso Malaya.

Condena e inhabilitación

Durante el tiempo de prisión preventiva, Muñoz fue condenado en varios casos por cohecho, malversación de fondos públicos y por prevaricación. Salió de la cárcel el 17 de octubre de 2008 tras casi dos años y medio entre rejas en la prisión de Alhaurín de la Torre.

Posteriormente, en 2013, fue condenado a siete años y medio de cárcel y 10 años de inhabilitación de desempeños públicos por prevaricación. Es absuelto entonces de los delitos de malversación de caudales públicos y el subsidiario o alternativo de fraude.

En octubre de ese año es también condenado por la Audiencia Provincial de Málaga a dos años de cárcel y 16 de inhabilitación por delitos de fraude y prevaricación.

El caso Malaya también acabó salpicando a sus exparejas. Isabel Pantoja y Mayte Zaldívar fueron condenadas a 2 y 3 años de cárcel, respectivamente.

Enfermedad

Durante el tiempo que estuvo en prisión, acumuló distintas patologías. Su grave enfermedad le permitió a partir de 2016 salir de la cárcel, con alguna polémica como cuando trascendió un vídeo, en 2018, bailando sevillanas.

En mayo de 2021, aún no habiendo cumplido las tres cuartas partes de su condena, la Audiencia Nacional le concedió la libertad condicional por las graves dolencias que padecía, entre ellas una cardiopatía isquémica-hipertensiva, diabetes y un aneurisma de aorta.

Este martes, el que fue alcalde de Marbella desde 2002 a 2003 ha perdido la vida a los 76 años a causa de un cáncer de pulmón con el que llevaba meses luchando. Su trayectoria quedará para siempre marcada en una ciudad que aún siente las grietas del gilismo.