El último blog del año es una mirada personal a 2022. Un año de muchas experiencias nuevas, un año de aprendizaje, de nuevas oportunidades y de adaptación a una nueva vida.
Hubo muchas primeras veces en 2022. Nuestra primera Semana Santa y Feria en la ciudad, con todas sus tradiciones, colores y música. Capté ambos eventos en estas dos galerías de fotos.
También hubo comida, mucha comida. En Semana Santa probé una docena de variedades diferentes de torrrijas tras un reto en Twitter para averiguar quién hacía las mejores de la ciudad, seguido de la experiencia bastante extraña de limones cascarúos y caña de azúcar. Qué curiosa combinación, pero al menos la probé una vez.
He tenido mucha suerte de conocer a tanta gente nueva y amable desde que me mudé a la ciudad y, si no hubiera sido por ellos, podría haber tardado mucho más en descubrir platos como el caldillo de pintarroja de Málaga, los caracoles, los callos o el gazpachuelo, que divide opiniones.
¿Os podéis creer que la tormenta de calima y el efecto que tuvo en los edificios de toda la provincia ocurrió este mismo año? Y ha hecho calor, por cierto, mucho calor. Uno de los años más calurosos registrados, con muy poca lluvia. La lluvia solía ser una parte temida de la vida, aquí ahora la recibimos con una felicidad casi de celebración. Y necesitamos mucha más en 2023.
También hubo dos declaraciones que me llamaron la atención este año y todavía estoy intentando determinar cuál fue la más irreal. La ambiciosa afirmación durante la campaña electoral andaluza sobre la apertura de las dos nuevas estaciones de metro en el centro de la ciudad, cuando se nos dijo que los malagueños viajarían a la Feria del centro en metro. Quizás se les olvidó preguntar en qué año. Luego estaban las declaraciones del club, jugadores y personajes públicos de la ciudad, que vaticinaban que el Málaga CF lucharía por el ascenso esta temporada. Al acabar este año, somos segundos por la cola de la tabla. ¿Qué he aprendido? No creas todo lo que lees.
Para terminar este año, he elaborado para todos los seguidores de EL ESPAÑOL de Málaga una lista aleatoria de nuestros lugares favoritos en la ciudad en 2022. ¿Qué hace que un lugar sea especial para nosotros? Es una mezcla de ambiente, personal amable y buena comida. Y todos estos cumplen los criterios.
Para los desayunos, recomiendo encarecidamente La Malagueña y El Diamante, cien por cien malaguita. En cuanto a bares, siempre sabéis que recomiendo La Pechá y ahora sumo El Carpintero. Y respecto a los restaurantes donde hay que sentarse en la barra, Mesón Ibérico, Lo Güeno y La Cosmo.
Quiero agradecer a mi querida Alba Rosado y al equipo de EL ESPAÑOL de Málaga la oportunidad de compartir mi experiencia de la vida en Málaga vista a través de los ojos de un 'guiri' en 2022 y deseo de corazón a todos los lectores una feliz Navidad, salud, felicidad y paz en 2023.