La columna de hoy es corta y directa. He escrito este blog antes del importantísimo partido en casa contra el Burgos de este fin de semana, pero sea cual sea el resultado, el mensaje no cambia.
El Málaga Club de Fútbol, una institución en tu ciudad, está a sólo 18 partidos de desaparecer del fútbol profesional en España. Toda persona interesada en el fútbol de la ciudad debería estar horrorizada por lo que ha venido ocurriendo con este club en la última década.
Ahora no es el momento de señalar con el dedo a aquellos que han llevado al club al borde del abismo, ya que ninguno de ellos será considerado responsable hasta que esta temporada haya llegado a su fin y alguien haya sido finalmente contratado para tomar algunas decisiones y cambios importantes.
Así que, de aquí al 28 de mayo, todo lo que podemos hacer es esperar, rezar, sufrir y, sobre todo, dar todo nuestro apoyo a este equipo y a quienquiera que lo dirija, nos guste o no lo que vemos.
Si has renunciado a este club hace años o fuiste a La Rosaleda cuando el club estaba de moda y jugaba la Champions League (¿eso pasó de verdad o todo fue un bonito sueño?), el descenso tendría un efecto devastador en el futuro del club y sería una pésima noticia para esta ciudad. El club de fútbol de esta ciudad te necesita ahora.
Entra en la página de entradas del Málaga CF (https://www.malagacf.com/entradas), compra una entrada para uno de los próximos partidos, lleva a tu familia o pregunta a tus amigos, apoya al equipo y pon tu granito de arena para ayudar a conseguir lo que parece cada vez más improbable a medida que avanza esta temporada, la supervivencia del Málaga en Segunda y la continuidad de este club en años venideros.
La supervivencia esta temporada es absolutamente esencial de cara al futuro económico del club y a la esperanza de que algún día, personas con los fondos adecuados, que vean el potencial de este gran club, vengan a rescatarlo, sanarlo y convertirlo en algo de lo que todos los malagueños se sientan orgullosos. El Málaga CF es una parte esencial de esta ciudad, como un pitufo mixto, la Semana Santa, la Feria y un vermú. ¡Aliquindoi! Por nuestro club de fútbol, por nuestra ciudad.