Mucho se ha hablado de la marcha de Ferrovial a Países Bajos. Algo tendrá el agua cuando la bendicen. Me confieso ignorante de las causas, pero entiendo que es una decisión tan soberana como que nuestros amados líderes pongan en el BOE lo que consideren oportuno siempre que esté de acuerdo con el ordenamiento internacional, europeo y constitucional. Cada uno manda en su casa, pero unos más que otros. Minar el principio de libertad de empresa no es buena idea.
Es cierto que la deuda soberana del país de Erasmo tiene mejor rating y por tanto la financiación se supone que se obtiene a mejor coste. No es lo mismo AAA que A-. Es cierto también que la fiscalidad total es menor (41,2% en Holanda frente al 47% en España), aunque a las personas (IRPF) es mayor que en la tierra de Cervantes (20,5% en la tierra de los tulipanes frente al 35,8% en la del jamón ibérico).
De 2020 a 2021 el bono a 2 años de Holanda se abarató un 0,02% frente al español que se encareció un 0,05%. En el bono a 10 años el español también se encareció más, el 0,37%, 0,31% según la OCDE. Con la guerra y la inflación todo se está acentuando. No es falso que el Banco Central Europeo se ha dado cuenta de que buena parte de la inflación, por más que le eche la culpa a Rusia, la han generado ellos, aumentando la masa monetaria, la liquidez y su balance a límites nunca vistos inflando un globo que ahora no saben desinflar sin que estalle.
La FED americana se ha cobrado su primera víctima con en el Sillicon Valley Bank que, con la subida de tipos, ha tenido tantas pérdidas en su cartera de bonos que se ha comido el capital. Ahora, los bancos centrales han dejado de comprar activos y están subiendo tipos a la carrera y calladitos para que no se les vea con la cerilla humeante y la lata de gasolina.
De hecho el Reino de España se está poniendo a emitir deuda y las colas para comprarla eran para escribir otra columna. Hay tanta liquidez que la banca comercial ignora los depósitos de los contribuyentes y les cobra lo que toca de intereses con margen a los deudores sin apenas retribuir a los ahorradores. Es para coger “la pasta” y ponerla bajo el colchón y aun así no sacaríamos la liquidez sobrante que hace que primero la banca financiara casi sin margen con tipos negativos incluso, y ahora lo haga sin retribuir los depósitos.
Dos anomalías que producen crisis cada vez más frecuentes y cada vez más intensas. Hemos socializado las pérdidas de la banca y privatizado los beneficios. ¿Quién piensa en el “pringadillo” del ciudadano medio? Feudalismo 4.0. Trabajas y cobras entre el 50 y el 70% de tu salario, gastas y te dejas el 21% del neto, ahorras y te llega el 79% de los pírricos intereses o rentas del ahorro, la inflación te come el ahorro a tasas del 6-7% anual.
Un salario de 50.000 euros se te tiene que convertir en 90.000 a estas tasas en 10 años para mantener la paridad de compra, haciendo que la competitividad de España respecto de países con baja inflación sea cada vez menor. Por la misma razón, en 10 años 50.000 euros de ahorro se convierten casi en la mitad en paridad de compra.
Y no se preocupe Vd. que si, por suerte, ha podido generar plusvalía suficiente para tener más de 3 millones de euros al cabo de los años, le caerá un impuesto extra y si al final de la vida, una vez convenientemente exprimido, le dejas algo a tus hijos también le caerán sucesiones, donaciones y transmisiones patrimoniales en según qué comunidades autónomas. Tanto plomo en las alas ponemos a la economía que la productividad por hora en el 2000 era de 45 dólares en España frente a 59,7 de Holanda, 56 de Alemania, o 57,2 de Francia. Dos décadas después en 2021, España produce 51,8 dólares por hora frente a 67,7 de Holanda, Alemania y Francia.
Durante un tiempo hemos cambiado deuda soberana cara por más deuda barata y el servicio de la deuda ha sido llevadero pero con los tipos subiendo y sin que te compre el Banco Central Europeo los costes de la financiación subirán y el valor de los activos caerá. Mejor estar en territorio AAA que en territorio A- .
No crean que Holanda, como se escucha y lee por ahí, es un receptor neto de inversiones, todo lo contrario, de los países serios, es el mayor emisor de inversión, su saldo neto es negativo en 141.741 millones de dólares que invierte fuera de Holanda. Es evidente que las empresas que invierten mucho fuera encuentran un buen lugar en el delta del Rin. Para que se hagan una idea, España no emite, sino que recibe 43.909 millones, Francia 88.427 y Alemania 73.654. Todo es, tan solo, una fracción de lo que recibe EEUU (448.324) o China (333.929). Hay otros países emisores, todos de ultra baja fiscalidad, por no llamarles otra cosa, Liechtenstein (-87.212), Chipre (-33. 35) o Luxemburgo (-9.053). Los datos son del Banco Mundial para el 2021.
Cuando eres una empresa internacionalizada como Ferrovial, tienes buena parte de tus ingresos vía dividendos de filiales, pero también inviertes en proyectos, empresas, concesiones como los aeropuertos ingleses, muchas autopistas en EEUU y obras que no dan resultado aún, es decir, que te dan pérdidas.
Nuestros amados líderes han decidido que las pérdidas de las filiales no sean deducibles fiscalmente. Es decir, sólo cuentan las ganancias, pero no puedes quitar las pérdidas. Esto no sólo está llevando a empresas de la piel de toro con la mayoría de su actividad económica fuera a pensar si tiene sentido quedarse donde más nos gusta estar, en casa, sino que se están deshaciendo grupos de consolidación fiscal.
Dicen los amados líderes que no hay un problema de inseguridad jurídica. Llámenle como quieran, pero es imposible hacer un Cash Flow a 3-5 años vista por una serie de decisiones que aparecen “out of the blue”, de repente. Nadie sabía que subirían los topes de cotización de la seguridad social, pero pasó de 4.070 euros de base mensual a 4.139 en 2021 y en octubre de 2022 nos enteramos, con los presupuestos de la empresas ya hechos y aprobados, que subía para 2023 a 4.495 euros al mes, una cuantía aproximada de 54.000 euros anuales.
Como la parte del león de la seguridad social lo paga la empresa, los costes laborales no paran de crecer. Si tienes miles de empleados como Ferrovial, esto es un pico. Nadie sabía que una serie de imprescindibles derechos laborales, como bajas para cuidado de familiares, que pagarán las empresas, otro pico, y para bajas por problemas menstruales, que pagarán las empresas, y cuotas de género en mercados que no tienen suficiente oferta femenina, que pagarán las empresas, ni bajas de maternidad y paternidad que también tienen costes para las empresas.
No me parece mal que avancemos en derechos. Lo razonable es que cada uno administre sus propios bolsillos y, ya que se paga una cantidad no desdeñable de impuestos, que las medidas del BOE se paguen con cargo al erario y no con cargo adicional a la cuenta de explotación de las empresas deviniendo un impuesto encubierto y un lastre evidente a la productividad y la competitividad que es casi un 20% peor que la de nuestros pares.
Esta semana, estamos sabiendo que, si no nos gusta que nos suban los topes de la seguridad social inesperadamente, lo que viene es que se eliminan los topes haciendo que los costes salariales del personal más cualificado, aquel que necesitas más para garantizar que puedes competir, nos subirán porque se eliminarán los topes a la Seguridad Social. Nos dicen que en Francia es así, y es cierto. Lo que no nos dicen es que en Francia producen 66,7 dólares por hora frente a los 51,8 de aquí, que con estas medidas serán menos. Tampoco nos dicen que la presión fiscal real a las empresas en Francia por impuesto de sociedades es casi nula, del 0,2% frente al 10,6% según el ranking de PWC “Paying Taxes 2021”.
Las ingenieras con experiencia de gestión, y alta dirección, se están convirtiendo en la última coca cola del desierto. Piensen que en un Consejo de Administración se asumen responsabilidades mercantiles, laborales, fiscales que suponen la responsabilidad con todo tu patrimonio y en seguridad laboral incluso penales. Piensen que se requiere experiencia, formación y conocimiento del sector de la empresa de la que eres consejera.
En sectores como las ingenierías (y Ferrovial lo es) o en tecnologías, por desgracia, aún no tenemos tasas de mujeres en las carreras técnicas superiores al 20% hoy. En Málaga, es inferior al 15% en Informática, Telecomunicaciones e Industriales. Pero hace 20 años, la tasa era aún menor, es decir, que tener el 40 o 50% de mujeres en los Consejos de Administración creará una inflación que pagarán las empresas y muchas estarán (si no están ya) en más de un consejo por motivos obvios. Sabemos que hay una directiva europea de igualdad que se debe trasponer antes de 2026 pero la solución es potenciar las vocaciones y la igualdad en las universidades, no imponerlas por ley en las empresas mientras no se hace lo mismo en la administración pública.
Hay países que, por su oferta de talento, sus infraestructuras, sus sistemas educativos, mercados financieros, mercados laborales, su regulación y su estabilidad, hacen que las empresas que se implantan allí ganan competitividad. No podemos obviarlo. Quizá por ello, Holanda, a pesar de poner más presión fiscal real a las empresas, está a la cabeza en productividad por hora con Alemania y Francia.
No me imagino yo que en Holanda, para ser maestro de escuela, se requieran solo 60 horas (6 créditos o un cuatrimestre) de lengua o matemáticas en la carrera como se está preparando en el proyecto de los futuros planes de estudios de Magisterio en España. Sorprende que en el mismo proyecto se considere que para impartir Educación Física se requieran 480 horas de formación. Y de estos, “altamente preparados” maestros, tendremos que nutrirnos de ciudadanos capaces en todos los aspectos, no solo en la práctica deportiva, que será excelente, imagino.
Cuando ves a los amados líderes que a sus funcionarios públicos no les aplican las subidas salariales que piden/sugieren a las empresas y cuando ves que los funcionarios acceden por oposición, y por tanto por mérito, no por género, todavía, te preguntas por qué te imponen en tu casa lo que no aplican en la de todos, que es la que mejor deben administrar.
Invitar a la reflexión, sugerir, proponer, es bienvenido, pero que te lo pongan en el BOE usurpando los poderes que la Ley de Sociedades otorga a la Junta de accionistas, es una injerencia en las casas de cada uno que les puede hacer pensar en darse una vuelta por Europa a ver si encuentran sitios mejores.
Comparaciones son odiosas pero si se consulta el ranking Ease of doing business del Banco Mundial estamos el número 30, por delante de Francia (32) o de Holanda (42), en esto estamos un poco peor que en innovación (el 29 en el Global Innovation Index). Dos países que están a la cabeza en Innovación, Israel y Suiza están por detrás nuestra en facilidad para hacer negocios (el 35). Por el tamaño de nuestra economía deberíamos estar el 10 o el 11. El primero del mundo, si les interesa, es Nueva Zelanda.
Cambiar los costes fiscales y sociales cada año no permite planificarse, es así. Tampoco invita a que las empresas vengan a invertir. Miren Irlanda. No solo Países Bajos, no vaya a ser que piensen que hay un sesgo histórico o cultural.
Nuestros amados líderes nos animaron fiscalmente a invertir en I+D con deducciones. Cuando las deducciones acumuladas por inversión en I+D no eran convenientes, nos limitaron el máximo que podíamos deducirnos. Aquellos activos fiscales, a muchas empresas nos van caducando y los tenemos que ir pasando por pérdidas.
Durante una época, se nos animó a comprar empresas, y los fondos de comercio eran fiscalmente deducibles. Luego, cuando hizo falta caja, los hicieron no deducibles, con el daño consiguiente a los que habían planificado un determinado flujo de caja que se fue a la Agencia Tributaria. Luego, se volvió a cambiar y se hizo contablemente amortizable en 10 años, pero fiscalmente en 20. Todos estos cambios para arriba y para abajo dan la peor impresión a los inversores internacionales y pueden animar a las empresas españolas que tienen más del 50% de su actividad fuera a llevar su sede a lugares más previsibles dentro de la UE.
Imponer con el BOE cómo deben funcionar las empresas privadas y dar bandazos fiscales en una EU que aún debe una armonización fiscal a sus ciudadanos es sembrar vientos que pueden hacernos llorar sobre la leche derramada.
Los cambios fiscales que describo sucedieron con Montoro y con Montero, con ambos partidos de gobierno, unos supuestamente “business friendly” y otros que se ponen a tachar de anti patriota a un empresario por decidir lo que más le conviene a su empresa, sus financiadores, clientes, trabajadores, proveedores y sus accionistas que, en buena parte, son y serán internacionales. Empresario malo, negrero, explotador, destructor del medio ambiente, y ahora… mal español.
¿Nadie ha pensado que, de la noche a la mañana, en 2018, un señor ministro llamado Ábalos anunció que se acababan un buen número de peajes de más de 1.000 kilómetros de autopistas? El mayor perjudicado fue Abertis y el contribuyente. ¿No se dedica Ferrovial también a las autopistas? El resultado es que en 2022 solo el 18% de los ingresos de Ferrovial venían de España con EEUU, Canadá y Reino Unido superando el 50%.
Durante mucho tiempo se ha estado ayudando a empresas extranjeras a instalarse en España que, cuando cierran, porque no tienen viabilidad, o tienen alternativas mejores, todos los amados líderes van corriendo demasiado tarde y les recuerdan que se les ha ayudado con mucho dinero público. Sigo sin entender cómo se dejó caer Isofotón, el inventor de la célula fotovoltaica de silicio bifacial de la que Europa importa 70.000 millones de euros al año, o cómo se dejó que Gamesa la comprara Siemens en lugar de tenerlas a 4 turnos haciendo paneles fotovoltaicos y aerogeneradores.
Hace tiempo que defendemos que el dinero público debe tener condiciones de permanencia que garanticen que las externalidades y ventajas para el territorio se cumplen y que, si una empresa Europea es adquirida por una no europea, se deba devolver el dinero público recibido para que no solo los accionistas se beneficien de la plusvalía de la venta sino todos los que han invertido en ella, incluido los contribuyentes y, además, se eleven las barreras de entrada para que los gigantes sobre todo chinos y americanos vengan de compras a Europa, con su abundantísimo dinero barato, complicando la aparición de unicornios europeos. ¿Por qué Europa no tiene un Google, un Meta, un Amazon, un Tesla o un Qualcomm?
El caso de ARM es flagrante, la UE le inyectó enormes cantidades de dinero público de las Joint Undertakings para Supercomputación, desarrollaron los microprocesadores más potentes y de menor consumo del mundo, se los compró el fondo japonés SoftBank y, tras haber tenido una oferta multimillonaria de la norteamericana NVidia que, por competencia, no ha volado, saldrán a bolsa en EEUU. Recientemente se ha hecho público que, a pesar de las sugerencias de la Bolsa de Londres (donde nacieron) de que coticen también allí, lo han descartado. Una empresa de Londres, hipervitaminada con dinero público europeo, acaba en las manos de unos japoneses que la sacarán en la bolsa de Nueva York. ¿Qué lecciones aprenden nuestros amados líderes? Me temo que están demasiado ocupados ganando las próximas elecciones.