Roberto López, "por lo que sea", es muy de los Reyes Magos. Melchor le hizo una videollamada y le preguntó que cómo la iba a hacer de su representante en la cabalgata de Málaga. Ante esto nadie puede decir que no, lógico. El presentador de Llegó la hora, el magacín de 101TV, recuerda aquel regalo de 1983: la equipación del histórico Arconada.
Madrileño de nacimiento y rinconero de adopción, lleva años en la tele local haciendo los días más divertidos y completos. Con sus entrevistas y la variedad de secciones ha creado un producto diferente: un early day show, en contraposición a los famosísimos late night. O sea, que tiene un programa a mediodía, pero con un formato que en las teles nacionales ocuparía la última franja del día.
Mientras peina la barba de Melchor para la cabalgata, saca un hueco para responder a las doce preguntas de este racimo de uvas malaguitas.
¿Bajar a ver las luces de Málaga le provoca mucho agobio o no le falta ni el paseo por los puestos del Parque? ¿Qué le ha parecido el alumbrado este año?
En mi caso es un clásico. Me toca hacer la inauguración del alumbrado para 101TV Málaga y tengo hijas que quieren verlas. Las luces no pueden faltar. Además, este año, por temas de trabajo, estoy más en el centro que el Marqués de Larios. Por lo tanto, a su pregunta digo que a tope con las luces.
¿Málaga o Vigo? ¿Qué opina sobre esta competición navideña?
No me gusta la competición. Soy más de compartir. Ya lo decían en Barrio Sésamo: "Solo no puedes, con amigos, sí". Compartir es vivir. Pero, Málaga siempre, por Dios.
¿Una tradición familiar que nunca faltará en estas fechas?
Poner el árbol en el puente, las cenas, los cumples de mis cuñados, la Lotería, los Saltos de Esquí, el Concierto de Año Nuevo pero, sobre todo, volver de Nochevieja, ya de madrugada, y poner La 2. Lo sé, muy loco.
La Lotería de Navidad… ¿Es de echarla por si toca algo o es de los que opina que es 'el impuesto de los tontos'?
¿Aún no he dicho que fui Niño de San Ildefonso? Pues lo digo. Soy muy de la Lotería. Es de lo que más ilusión me hace. Me gusta hacer todos los años un programa especial en radio o tele, el soniquete de los niños, la alegría de la gente, lo de tapar agujeros y la salud. Es un ritual que me emociona desde pequeño. Además, siempre llevo algo de lotería, que comparto con familia y amigos y, lo mejor, nunca me ha tocado nada. Lo sé, las contradicciones de la vida.
¿Qué prefiere: Nochevieja, Nochebuena o Reyes?
Este año, por lo que sea, me quedo con los Reyes. En verdad, me gusta esa cosa infantil, mágica e ilusionante de la Noche y la Mañana de los Reyes Magos. Además, no se lo digáis a nadie, pero tengo línea directa con el Rey Melchor, así que podéis pedir lo que queráis. Eso sí, recordad: sed buenos. Estoy entre E.T., El Extraterrestre, y Melchor.
¿Es de los que se atraganta con las uvas? Háblenos sobre su Nochevieja… ¿Macrofiesta de etiqueta, fiesta con los amigos o quedada familiar?
He trabajado todos los modelos de Nochevieja. Ahora soy más de quedada familiar, sin dejar de soñar con una Nochevieja con amigos tipo anuncio de cerveza de verano. Todo muy divertido, efervescente y mediterráneo.
¿Cuál es el plato que nunca faltará en estos días?
Polvorones. La vida sería mucho más triste sin polvorones.
¿Y ese villancico que es imperdonable pasar de largo?
No soy muy de villancicos, pero porque no los entiendo: lo de Holanda ya se ve, ¿cómo que se ve Holanda?, pero mira cómo beben los peces en el río, ¿qué beben?, ¿no se ahogan?, por no hablar de la Marimorena… Dame un Mesías, de Haendel, o un buen Oratorio de Navidad, de Bach, y a gozar.
¿Era de ir a ver la Cabalgata de Reyes? ¿Por qué zona solía verla? Si tiene alguna anécdota de recuerdo en ella, cuéntenosla.
En Málaga, soy muy de verla en 101TV. Este año, la veré desde lo más alto. Va a ser muy bonito. También recomiendo la de mi pueblo, Rincón de la Victoria, que es más pequeña pero igual de entrañable.
¿Cuál fue el mejor regalo de Reyes de su infancia? ¿Por qué?
1983. El traje de portero de Arconada. En verde. Nada pudo superar aquel instante.
¿Y ese que se dejaron por el camino y nunca llegó?
No soy muy de pedir. Me gustan las sorpresas y jugar.
De niño… ¿Los Reyes le traían carbón o chucherías? ¿Era usted buen estudiante y un niño responsable?
Era lo que se dice, un buen niño. Luego me convertí en un cocorroto con estudios, de los que se sentaba en la última fila y aprobaba todas. El equilibrio perfecto entre el placer y el deber. Siempre buscando la virtud. Agotador.