Rancheras mexicanas, rap y mucha solidaridad: así fue la gala de la Fundación Starlite

Un año más, y ya van 15, Marbella ha celebrado la gala donde la solidaridad se lleva por bandera. La Gala Starlite, este año dedicada a México, volvió a llenar la cantera de Nagüeles de rostros conocidos tales como Antonio Banderas, Will Smith, Carlos Vives o India Martínez por una buena causa: recaudar fondos para diferentes fundaciones.

En concreto, para la Fundación Niños en Alegría, fundada por la creadora de Starlite y gran anfitriona de la gala, Sandra García-Sanjuán y su compañera Alejandra Alemán, hace ya más de 20 años; y para la Fundación Lágrimas y Favores, del malagueño Antonio Banderas.

De hecho, el malagueño reconoció que casi el 95% de los fondos anuales que recibe la fundación vienen de la Fundación Starlite. “Esta noche está dedicada a México. Un país con el que tengo una relación muy entrañable, donde he realizado siete películas, y he pasado casi tres años de mi vida”, explicó Banderas. 

Como ya es tradición, la gala estuvo presentada por el imitador Carlos Latre y la modelo argentina Valeria Mazza, que pusieron orden a las caóticas y ya clásicas subastas benéficas en directo. Así, como lleva ocurriendo desde sus comienzos, Ford volvió a ser el partner de movilidad de la gala, presentando justo antes de su inicio un nuevo modelo de coche. En esta ocasión, el Ford Capri, un viejo conocido que viene más renovado que nunca.

Para ello, contaron con un equipo de 'mujeronas' como María Casado, Sandra García-Sanjuán, Valeria Mazza o Cayetana Guillén Cuervo. Valeria confesó ser una gran amante de los coches y agradeció a la firma el hecho de que sus coches sirvieran para unir a todos en una noche tan especial como la gala Starlite. Así, Cayetana, siguiendo con la misma idea reconoció que "sin patrocinadores tan involucrados como Ford" estas acciones no saldrían hacia delante.

Las embajadoras.

Tras un vaivén intenso de celebrities por el photocall --posaron Paula Echevarría, Toni Acosta, Irene Villa, Blanca Paloma o Sofía Ellar--, dio comienzo la gala, dedicada a México. Calaveras y flores de colores estaban en todos los rincones de la cantera y en algunos looks, aunque fueron más los invitados que se saltaron el dresscode que los que lo cumplieron. 

Donde sí que estuvo México fue en la banda sonora de la gala. Si bien India Martínez homenajeó a Chavela Vargas para arrancar la noche con un Will Smith totalmente entregado, Carlos Vives interpretó La gota fría con el trío sevillano Los Alpresa por sorpresa. La orquesta Larios Pop del Soho también tocó en directo varias piezas como La Bikina, de Luis Miguel. También hubo tiempo para Las mañanitas, en la voz de Juan Peña y Miguel Poveda... e incluso intentó unirse al tema Will Smith con un batiburrillo de español.

Durante la velada se homenajeó a varios famosos por su labor filantrópica en diversos campos. A Cayetana Guillén Cuervo por su labor contra la violencia machista; a India Martínez por su destacada trayectoria como artista y defensora de los derechos humanos y su defensa hacia los jóvenes más vulnerables; a Javier "Pupi" Zanetti por el trabajo que hace con su fundación para mejorar la vida de los niños en Argentina; a Margarita Vargas de Borbón, por su compromiso dando recursos a niños y jóvenes vulnerables y a Carlos Vives, por su fundación, Tras la Perla, con la que ha impulsado proyectos medioambientales muy importantes y necesarios en Latinoamérica.

India y Poveda, en la gala. Starlite

Además, también se subastaron diversos artículos para recaudar fondos, como decíamos, para las fundaciones Niños en Alegría y Lágrimas y Favores --en las últimas 14 galas han logrado más de cuatro millones de euros--. En esta ocasión, Will Smith logró subastar, a golpe de rap, una botella de Larios 12 por 20.000 euros. También se pujó por una guitarra firmada por Antonio Banderas o un cuadro realizado por el artista Aldo Comas, pareja de la actriz Macarena Gómez.

Algo más breve que en años anteriores, la gala --cuyos invitados pagaron 1.000 por cubierto-- finalizó con una gran tarta sobre el escenario y con los anfitriones soplando las velas acompañados de los premiados. Por, al menos, otros 15 años más de solidaridad.