Málaga se ha posicionado como una de las provincias con más estrellas Michelín de España. Ocho estrellas se reparten entre siete restaurantes de toda la provincia. Hay quien siempre ha soñado con probar un menú de alguno de ellos, pero por esta distinción ni siquiera se han animado a consultar los precios que estos manejan por miedo a no poder permitírselo. En este artículo recopilamos la horquilla de precios de los menús que EL ESPAÑOL de Málaga ha localizado en sus webs oficiales.
Para comenzar por los restaurantes que ostentan una estrella Michelín, hablaremos del restaurante José Carlos García. Más de veinte años de experiencia avalan a este chef - echó los dientes en el mítico Café de París- que asegura que desde su restaurante se "cuida y mima el producto de cercanía, que ocupa el 70% de la oferta gastronómica". Su menú degustación cuesta 126,50 € y está conformado por todo un abanico de sabores malagueños entre los que destacan propuestas de pescado como la quisquilla, el salmonete, el chipirón o la lubina, que comparten protagonismo con verduras y otras carnes.
En su web aseguran de que se trata de “un menú con una mirada a la cultura malagueña”. El restaurante de José Carlos García se encuentra en una ubicación privilegiada, el Muelle 1. El establecimiento solo cuenta con seis mesas, por lo que, más que nunca, es muy importante reservar con antelación si estás interesado en darte un capricho de altura en pleno Puerto de Málaga.
Sollo
Cocinero e investigador, Diego Gallegos, que está al mando de Sollo, es conocido en el panorama gastronómico como “el chef del caviar”. Brasileño de nacimiento y malagueño de adopción, este chef iba para abogado, pero acabó enamorado de la que ahora es su profesión: la cocina.
Si hay algo que caracteriza a la cocina de Diego es cómo ha introducido un punto singular en la gastronomía malagueña ofreciendo peces de río en su menú. Además, a raíz de su trabajo de investigación en la recuperación del esturión andaluz, utiliza el caviar como producto estrella en su cocina, de ahí su mote.
Desde Fuengirola, con su restaurante Sollo, ha conseguido una Estrella Michelín, dos Soles Repsol y una Estrella Verde Michelín. Esta última avala su respeto por el medioambiente.
Sollo cuenta con un menú degustación llamado Caminho. Por 150€ por persona, se puede degustar de este menú conformado, en primer lugar, por los siguientes aperitivos: Cóctel de bienvenida, sobrasada de río y reducción de Jerez, tartaleta de lomo en manteca de agua dulce, macarrón de crema ahumada y vegetales de temporada con proteína. Entre los entrantes con caviar, 15 gramos de Caviar Russian Style de Riofrío y Dom Pèrignon Vintage, aligot y aromáticos y bagre y salsa de mantequilla blanca.
Respecto a los platos principales, tartar de salchichón de trucha y sus huevas con emulsión de pasas de La Axarquía, lomo de tilapia en ceviche caliente y esturión confitado en grasa ibérica, crema vegetal y jugo ligado.
Y para acabar, los postres: mazamorra y chicha morada, quibebé de calabaza, espuma de queso y flores y Alfajor y cítricos; y los mignardises: selección de chocolates bean to bar e infusión de hierbas de su sistema acuapónico.
Messina
El restaurante Messina abrió sus puertas hace casi dos décadas gracias al esfuerzo de sus dos propietarios, Pía Ninci y Mauricio Giovanini, pero no fue hasta 2016 cuando, tras mucho trabajo, lograron el reconocimiento de la estrella Michelín. El Restaurante Messina está ubicado en la avenida principal de Marbella, junto al Hotel Amare.
La carta también ofrece una amplia variedad de productos locales como pescados y mariscos, todos, según el restaurante, de la costa marbellí. En todos los platos se puede apreciar una gran técnica, con presentaciones minimalistas, pero muy elegantes.
En cuanto a su menú degustación, este cuesta 95 euros por persona (extra de 43 euros por persona si eliges maridaje de vinos y 3,70 € el cubierto). Está conformado de los siguientes platos: merengues de la casa (italiano de vinagre balsámico, francés de zanahorias y suizo de arroz japonés), quisquillas marinadas y emulsión de remolacha, sandía marinada y su aguachile y falafel. Por otro lado, tartar “libanés” de crustáceos (según mercado); lubina, su caldereta y vegetales con mantequilla noisette montada; paletilla de chivo lechal, garbanzo y hierbabuena y, por último, chocolate con helado de turrón. El menú se sirve a mesa completa.
El Lago
El Lago es un precioso restaurante situado en el interior del Club House de Greenlife Golf de Marbella, en el corazón de Elviria Hills. Pese abrir en el 2000, fue cinco años más tarde cuando lograron esa Estrella Michelín con la que tanto soñaban y que han sido capaces de mantener hasta la actualidad.
Con el chef nerjeño Fernando Villasclaras al frente, este restaurante se ha convertido en una de las piezas fundamentales del desarrollo de la alta gastronomía en Málaga en los últimos veinte años y, consecuentemente, del resto de Andalucía.
Como curiosidad, este restaurante al mediodía se transforma en Midi, una propuesta gastronómica que surgió en 2020 para ofrecer al público local una opción más casual sin perder la esencia de El Lago como tal. Ha funcionado bastante bien.
En su web destacan el Menú Sazón, que se adapta en función de la época del año a la estación que corresponda. El de verano cuesta 120 euros por persona y está disponible en la cena todos los días (se sirve a mesa completa). El acompañamiento de vinos locales cuesta 45 euros y los nacionales, 53.
Entre los snacks de temporada del menú: Consomé vegetal sostenible, “la no mantequilla” de aceituna aloreña con su mollete de AOVE al vapor, merengue de kuzu, queso láctico de Coín con pisto, porra de remolacha y fresas con su tartar a la mostaza verde, alistados al ajillo y caviar de Riofrío y mini berenjena al jerez con baba ganoush de piñones
Ya en los principales, tomate verde con atún rojo en ajoblanco tradicional e higos a la brasa, Puerros del Guadalhorce en pepitoria y romesco ahumado, Beurre blanc de acelgas con gambas blancas de Málaga, Salmonete de Marbella con holandesa de sus higaditos y mango, Mollejas de corazón de ternera a la brasa en salsa bigarade, judias verdes y harissa, Chivo lechal a la mostaza, alcaparras y escarola a la brasa, La Axarquía: Boniatos con miel de caña y granizado de uva moscatel, Chirivía asada con sorbete de laurel, pera y nueces pecanas, Fresas de temporada en escabeche con láctico de vainilla y Mignardises
Nintai
Es el 'japo' por excelencia del municipio malagueño de Marbella. Al mando, el asturiano Marcos Granda. Nintai solo cuenta con doce asientos exclusivos alrededor de una barra de madera donde el itamae corta con sutileza el pescado y prepara un sushi "impecable" -también cuentan con la Omakase Room-.
Los productos premium de temporada, las combinaciones más originales y los maridajes especiales del sumiller con sake o con champagne, provocan en nuestras pupilas un desconocido pero sabroso sabor, el umami, en una atmósfera donde te sentirás descansado y relajado.
El gran menú en Nintai cuesta 155 euros por persona -también cuentan con otro al mediodía a 125- y se conforma de un aperitivo (zensai), un crudo (otsukuri), un plato de cocción al vapor (mushimono), otro a fuego lento (nimono), la selección del chef (shiizakana), sopa (shirumono), sushi (ocho piezas), prepostre (mizugashi), postre (yogashi) y los mignardises.
Skina
Es otro de los restaurantes que el chef asturiano Marcos Granda lidera en Marbella, un lugar que siempre ha tenido un hueco en su corazón. Abierto en 2004 y con dos estrellas Michelín, el chef propone una experiencia totalmente distinta a la de Nintai en Skina. Skina es todo un homenaje a la multicultura, de una forma muy creativa galardonando a la cocina tradicional del sur de España.
Con una carta de vinos de más de 950 referencias, en Skina celebran la gran tradición gastronómica andaluza, recreándola con imaginación y personalidad propia, empleando ingredientes de alta proximidad, temporalidad y calidad. Lo que viene siendo una reinvención de los platos de toda la vida.
Cuentan con un menú llamado ‘Producto de temporada’. Dentro de este se pueden degustar los siguientes platos: Ostra con gazpacho verde, Gazpachuelo con quisquilla de Marbella, Arroz de chivo lechal malagueño, Lubina al vapor con pil-pil y coliflor, Cochinillo con boniato y ciruela, Mango, naranja y pomelo y Chocolate, almendras y café. Tiene un valor de 235 euros. Este menú solo se sirve hasta las 20.30 horas. El menú de temporada con maridaje cuesta 344 euros.
Luego tienen otro donde el cliente puede elegir tres platos a su elección por 209 euros (275 con maridaje). Entre los entrantes, ostras con gazpacho verde, gazpachuelo con quisquilla de Marbella, arroz de chivo lechal malagueño, setas de temporada con huevo de campo o espárragos alpinos con calabacín.
De pescados y carnes, lubina al vapor con pil-pil y coliflor o cochinillo con boniato y naranja y de postres, mango, naranja y pomelo o chocolate con almendras y café.
Por último, cuentan con el Menú Grand Cru, el más caro (499 euros). Este lo conforman lo siguiente: Gazpachuelo con quisquilla de Motril, Champagne pommery cuvee louise 2004, Setas de temporada y huevo de campo, Domaine Lefleive P. Montrachet 2019, Lubina al vapor con pil-pil y coliflor, Domaine Lefleive P. Montrachet 2019, Cochinillo con boniato y ciruela, D.O. R. Duero Vega Sicilia único 2011, Chocolate con almendras y café, Pedro Ximénez T° Albalá 1946. Este menú también se sirve hasta las 20.30 horas.
Bardal
En la guía Michelín, al hacer referencia a este restaurante rondeño, aseguran que merece la pena desviarse de la carretera para disfrutar de dos estrellas Michelín en la que llaman la ciudad soñada, Ronda, una de las localidades más especiales de Andalucía.
"Estás en tu casa, conócenos", así se venden en su web cuando uno accede a ella. El Restaurante Bardal de Benito Gómez, catalán de origen, pero andaluz adoptivo, se encuentra a tan solo de unos metros del Tajo de Ronda. Su cocina es creativa, pero no se caracteriza precisamente por estridencias, sino por sabores reconocibles que enlazan con la tradición local jugando con contrastes y texturas. En la guía Michelín expresan que cuentan con un menú sorpresa que varía en función del número de platos, pero en su web encontramos dos menús diferentes, el Menú Bardal (170€) y el Gran Bardal (190€).
El Menú Bardal se conforma de lo siguiente: Infusión de setas y piñón, Bollo cremoso de champiñones y queso azul y Piñonada y jugo acidulado de pino. Por otro lado, Ventresca de atún y algas, Royale de erizos, raifort y caviar y Picaña a la pimienta verde. Así, también están disponibles la Cresta de gallo con bearnesa y el Cogollo a la brasa con emulsión de vaca, Judías verdes, labneh de oveja, flor de calabacín y anguila, Albacora con tomate, hierbabuena y Palocortado, Cebolla tierna a la brasa con suero de queso Payoyo, Ortiguilla a la mantequilla de perejil, Fricandó de berenjena, Rape curado y emulsión de suquet y Chivo con espinacas y riñón a la perigourdine. De postre, Apionabo e hinojo o Chocolate y cerezas y Petit-fours.
La selección de vinos cuesta 85 euros y la pala de quesos andaluces, 20.
Por su parte, el Gran Menú Bardal: Infusión de setas y piñones, Bollo cremoso de champiñones y queso azul y Piñonada y jugo acidulado de pino. Ventresca de atún y algas, Royale de erizos, raifort y caviar y Picaña a la pimienta verde. Cresta de gallo con bearnesa y Cogollo a la brasa con emulsión de vaca. Así, también están disponibles, Judías verdes, labneh de oveja, flor de calabacín y anguila, Albacora con tomate, hierbabuena y Palocortado, Cebolla tierna a la brasa con suero de queso Payoyo, Ortiguilla a la mantequilla de perejil, Fricandó de berenjena, Chipirón al pilpil de pimientos verdes fritos y pochas, Rape curado y emulsión de suquet, Pichón, lentejas y aceitunas y Chivo con espinacas y riñón a la perigourdine
De postre, Apionabo e hinojo, Tarta de manzana y helado de vainilla y Chocolate y cerezas y Petits-Fours