El emblema del empresario y sumiller Marcos Granda está en Marbella. En 2004, con 26 años, creó en la ciudad de la Costa del Sol su primer proyecto personal. Es el restaurante Skina, que ahora se reinventa en su 20 aniversario con un nuevo concepto y su mudanza a la milla de oro de la ciudad.

Con capacidad para 18 personas y un privado para 12, este restaurante de dos estrellas Michelin constará de diferentes espacios tanto en el interior como en el exterior.

Será en junio cuando lo que él entiende como ‘El gran restaurante’ abrirá sus puertas en una casa, estilo cortijo, en la milla de oro de Marbella. Situado en el número 7 de la calle Cánovas del Castillo, el arquitecto Juan Antonio Serra y el estudio de interiorismo Yolanda Meneses han traducido los deseos de Granda y transformado este espectacular inmueble "bajo su idea de confort, servicios y lujo".

Nueva bodega.

Además, Granda ha creado un área consagrada al I+D del grupo con una bodega en la que tendrán lugar experiencias todavía más cualitativas. Además, tendrá un champagne bar para 29 personas.

El cliente "sabrá que está ante una experiencia absolutamente revolucionaria desde el momento en el que cruce la puerta y sea bienvenido en la bodega, donde tendrá lugar el primer pase", según detallan en un comunicado. El segundo pase, los snacks, sucederá en una mesa central, en la cocina, y en el salón, continuará la experiencia del menú propiamente dicho.

Entrada del restaurante.

Su equipo continúa con Jesús Urda, en sala desde hace más de una década, y Mario Cachinero, jefe de cocina desde hace siete años. Cachinero contribuyó no solo a revalidar la primera estrella, obtenida en diciembre de 2008, sino también a alcanzar, 11 años después, la segunda, en 2019, y conservar ambas.

En cuanto a la cocina, su identidad andaluza no cambia, con una esencia que tiene mucho del recetario tradicional, según explican, "siempre con la técnica y creatividad del equipo de cocina, con el mejor producto y con la mirada puesta en una experiencia altamente cualitativa no solo para el paladar, sino para todos los sentidos".