Dani Sánchez respira Málaga por los cuatro costados. Es un niño de barrio, de los barrios del extrarradio de Málaga que se ha criado en un parque con un balón y al que la vida lo ha llevado a dar algunas vueltas, a pesar de su juventud, para volver a su ciudad y devolver al Málaga al fútbol profesional. Lo que más valora es el día a día con los suyos. Y cuando puede, sale a comer y cuenta sus preferencias en la sección gastronómica de EL ESPAÑOL de Málaga.
Desayuno: Bar Mesón Paco (Plaza de las Brigradas Internacionales)
Para malaguita, el sitio que Dani Sánchez recomienda para desayunar. No es compatible con su profesión, la de futbolista de élite, pero si se puede tomar una licencia elige el famoso bar de desayunos de la barriada de Puerta Blanca Mesón Paco, con su bocadillo estrella de carne mechada, tortilla de patatas y alioli.
Almuerzo: La Proa de Teatinos (Calle Andrómeda 11)
Dani Sánchez apuesta por el arroz, paella, para el almuerzo. Suele visitar, y recomendar a sus compañeros de equipo, el restaurante La Proa de Teatinos, en la calle Andrómeda. "El otro día se lo recomendé a Lobo -Lobete- para que fuese con su novia".
El arroz de cordero de bellota de La Proa de Teatinos
Cena: Sushisom (Avenida Velázquez)
Para la cena, Dani Sánchez apuesta por un sitio del perfil de los jóvenes, el bufé de comida japonesa Sushisom. "El otro día celebramos el cumple de mi hermano". Una de las peculiaridades de este restaurante de la Avenida Velázquez es que la comida te la sirve un robot.
Uno de los platos de Sushisom