El doctor Leandro Martínez Pilar es uno de los responsables de que el XXXII encuentro del Grupo Español de Dermatología Estética y Terapéutica de la Academia de Dermatología se haya desarrollado en Málaga.
Durante estos tres días de encuentro se han presentado las soluciones más innovadoras a los problemas de los pacientes a través de formación, actualización y difusión de las novedades en el campo de la dermatología estética y terapéutica.
Más de 600 dermatólogos reconocidos a nivel nacional e internacional han debatido sobre nuevas técnicas de rejuvenecimiento y tratamientos dermatológicos con el objetivo de solucionar con eficiencia problemas que afectan e importan a los pacientes. Este domingo, fecha en la que culmina el encuentro, el doctor Martínez atiende a EL ESPAÑOL de Málaga para hacer balance.
¿Qué supone este encuentro para Málaga?
Supone principalmente ser durante tres días el epicentro de la dermatología estética y terapéutica de nuestro país. También de carácter internacional ya que participan ponentes y asistentes no solo del territorio español. Además, ser el punto de encuentro de las últimas novedades y avances que hay en este terreno y, sobre todo, la referencia en la nueva cara que tiene la estética médica dermatológica.
Son 600 dermatólogos reunidos y en Málaga, ¿Qué supone para la Asociación?
Para nuestra Academia Española de Dermatología, que es la sociedad científica que nos aúna al 99% de los dermatólogos españoles, así como para el grupo de trabajo de dermatología estética y terapéutica, supone que volvemos o empezamos a tener cierta normalidad en relación con reuniones científicas después de la pandemia. Es poner un punto de esperanza, un punto de inflexión y un aire fresco, es saber que vas a poder trabajar cara a cara con otros compañeros de otras ciudades y de fuera de España. Vamos a hacer talleres con pacientes, vamos a exponer lo último que hay y vamos a buscar el consenso en los temas donde puede haber mayor controversia.
¿Cuáles son los puntos más relevantes para la profesión que tratados en el encuentro? ¿Y los más relevantes para la sociedad?
Hemos puesto el foco en cómo el dermatólogo aborda la estética. Como dermatólogos diagnosticamos, tratamos enfermedades y el área estética vamos más allá intentando buscar o alcanzar la ausencia de enfermedad. Promover la salud cutánea óptima con una visión clara que tenemos los dermatólogos de que una piel sana es una piel estética. Para ello presentamos un consenso en técnica infiltrativa para recuperar la pérdida de volumen, la aparición de las arrugas; presentamos novedades en toxina botulínica con la que tratamos las arrugas de expresión; presentamos novedades en el enfoque con los tratamientos láser y con fuentes de luz para intentar al rejuvenecimiento y, como no, las principales patologías dermatológicas como son el melasma, las cicatrices de acmé y el acmé propiamente dicho, la rosácea,… todos esos avances que hay actualmente con el uso de láser, fuentes de luz y/o fármacos.
¿Qué papel juega Málaga en las asociaciones nacionales de dermatología?
Málaga, como a mí me gusta decir, como malagueño que soy y me siento, goza de una muy buena salud dermatológica. El nivel de la dermatología malagueña es muy elevado y está a la vanguardia, al igual que de la andaluza, por lo que nos posicionamos, al igual que el resto de la dermatología española, como referente a nivel internacional y de ahí el interés que suscita el encuentro que vamos a desarrollar estos días.
¿Se han encontrado con alguna complicación al organizar un evento así en pandemia?
Como complicación podemos entender las medidas lógicas que todavía tenemos que cumplir de la pandemia como el aforo al 75 % en la sala, pero la realidad ha sido muy sorprendente. Nos hemos encontrado total disponibilidad, colaboración y ganas de hacer las cosas bien ajustándonos a las medidas para volver hacer reuniones, siempre y cuando estén todas las medidas implementadas y no supongan un riesgo. Nos hemos encontrado esa colaboración en el palacio de Congresos, en los hoteles de Málaga, en la hostelería, y como es lógico en los ponentes, asistentes y todas las personas implicadas en el desarrollo del congreso, lo que sin duda es de agradecer.