La introducción y cada vez mayor arraigo del uso de patinetes eléctricos como medio de desplazamiento está produciendo una revolución en el sistema de movilidad en las ciudades en los últimos años. No obstante, los expertos alertan de que su económico precio y la facilidad para manejarlo no es directamente proporcional a la seguridad de este medio de transporte, por lo que “se está produciendo un aumento exponencial de los accidentes provocados por los mismos. Justo acabamos de operar a un chico con una fractura muy compleja, que suele producirse por accidentes de motocicletas o caídas desde una gran altura”, advierte el doctor Rafael López Arévalo, jefe del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Hospital Quirónsalud Málaga.
El traumatólogo subraya que su equipo ha tenido ya varios casos de traumatismos craneoencefálicos graves e incluso algunos casos de fractura de vértebras cervicales. “Cada mes realizamos al menos una cirugía traumatológica por este tipo de accidentes; sin duda una patología creciente y alarmante”.
La incidencia de este tipo de accidentes se está equiparando a los de las motos, y es que no dejan de ser un vehículo similar, en el que el cuerpo está muy expuesto e incluso más desprotegido y, “como pueden alcanzar alta velocidad, se pueden producir lesiones de alta energía, como en una moto”, explica el doctor López Arévalo.
Según los expertos, aproximadamente un tercio de los pacientes que tienen este tipo de accidentes sufren un traumatismo craneoencefálico, más del doble de lo que se produce en los ciclistas. Un tercio acaba con alguna fractura y uno de cada cuatro suelen necesitar una intervención quirúrgica. Las articulaciones más habitualmente afectadas por este tipo de accidentes son las muñecas y los codos. También suelen encontrarse afectación de tibia o hombro o traumatismo craneoencefálico, que alguna vez llegan a ser importantes. Eso si hablamos del conductor del patinete, pero -alerta el doctor López Arévalo- que “también hay que tener en cuenta las lesiones que se producen a peatones o viandantes por atropello, en cuyos casos son muy habituales y especialmente graves las fracturas de cadera en personas mayores”.
De hecho, para el doctor es casi más peligroso el atropello que la caída, pues al viandante le pilla totalmente desprevenido e indefenso, por lo que en la caída es más probable que se fracture. Según el doctor López Arévalo, habitualmente es gente joven la que conduce el patinete y tiene este tipo de accidentes, entre los 20-40 años. Mientras que los atropellados suelen ser personas más mayores, “aunque también se atropella a gente joven”.
La elevada incidencia de accidentes por patinetes deja en evidencia la necesidad de una legislación más severa y restrictiva. Los expertos coinciden en que el uso del casco debería ser obligatorio, así como los controles de alcoholemia y de drogas para los conductores. Además, para el doctor López “debería haber un control mucho más estricto para el alquiler de patinetes, que todos llevasen su seguro, que los usuarios sean responsables, mayores de edad, que se protejan más…”
A modo de ejemplo, en Málaga capital durante 2022, la Policía Local registró 210 siniestros de vehículos de movilidad personal, lo que supone una media de 17 accidentes al mes y un aumento del 28% en comparación con el año anterior. Unas cifras alarmantes que, según los expertos, se estima que continuarán aumentando. Solo en el primer trimestre de 2023 se acumulan ya 80 accidentes.