La diabetes es una enfermedad crónica que se origina como consecuencia del aumento de los niveles de glucosa en la sangre. Mantenida en el tiempo, puede desencadenar en isquemia crítica, con lesiones y ulceraciones de la piel. Las estimaciones de la Federación Internacional de Diabetes (FDI) proyectan para los próximos 20 años un incremento de la prevalencia mundial de la enfermedad de un 46%.

Esto supondría que 1 de cada 8 adultos (aproximadamente 783 millones) estará afectado por la patología. "Sin un adecuado tratamiento, el riesgo de padecer amputaciones es altamente superior en las personas diabéticas que en las que no tienen la enfermedad", explica el doctor Mariano Palena, especialista del servicio de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital Quirónsalud Marbella.

La isquemia crítica (disminución transitoria o permanente del riego sanguíneo de una parte del cuerpo) es la forma más grave de enfermedad arterial periférica, y puede llevar a la amputación de los miembros inferiores y la muerte del paciente. Se estima que en torno al 85% de las amputaciones relacionadas con la diabetes serían evitables con un abordaje adecuado a tiempo.

En este sentido, el hospital marbellí ha implantado un programa pionero en el centro de carácter internacional, cuya puesta en marcha ha logrado reducir al mínimo el número de amputaciones por pie diabético, logrando el salvamento y la recuperación funcional de la extremidad en casos complejos.

Reducir las mutilaciones 

El doctor Fernando Gallardo, responsable del servicio, recalca la implicación de todos los integrantes de la unidad, una plataforma con la que se ha conseguido reducir las mutilaciones en situaciones que se consideraban irreversibles. "La cifra ahora es prácticamente residual", subraya el experto.

Asimismo, forman a otros médicos especialistas de otros centros nacionales e internacionales en técnicas y tecnologías avanzadas (angioplastias infrapopliteas y de las arterias distales del pie).

El perfil del paciente afectado de pie diabético está cambiando en la medida en que cada vez se vincula a población más joven. “El pie diabético sigue siendo un problema importante y de alta prevalencia en segmentos de edad avanzada pero también hay que advertir su creciente afectación en generaciones jóvenes debido a hábitos de alimentación inadecuados que dan lugar a obesidad y diabetes”, explica el doctor Gallardo.

Síntomas más habituales 

En relación a los síntomas más habituales, los expertos inciden en la necesidad de que los pacientes diagnosticados de diabetes se mantengan alerta ante cualquier cambio de color y aspecto del pie.

La pérdida de sensibilidad, el enrojecimiento, la palidez o inflamación son señales que pueden estar advirtiendo de deficiencias de circulación sanguínea. Igualmente hay que prestar atención a la aparición de zonas rugosas o escamosas, ulceraciones o problemas relacionados con las uñas. Ante cualquier signo sospechoso, es preciso acudir de inmediato al médico porque pueden alertar sobre el inicio del pie diabético.

El servicio de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital Quirónsalud Marbella presta atención vascular urgente las 24 horas, los 365 días al año, y está compuesto por los doctores Fernando Gallardo, David Abad, Matteo Pizzamiglio, Paolo Cassoni, Elisa Piccolo y Mariano Palena.