¿Cuánto contaminan los turistas que vienen a la Costa del Sol?

¿Cuánto contaminan los turistas que viajan a la Costa del Sol? Hace unos años a nadie se le ocurría ni siquiera pensar en eso pero, en pleno cambio climático, luchar por el medio ambiente se ha convertido en una necesidad. Nadie va a dejar de viajar por eso y no es lo que se pretende, pero sí hay ya fórmulas para conocer cuánto se contamina y cómo compensarlo con la plantación, por ejemplo, de árboles. Turismo Costa del Sol ha presentado esta semana una calculadora para medir la huella de carbono y en EL ESPAÑOL de Málaga la hemos probado. 

El funcionamiento es muy sencillo. Hay que responder a cinco preguntas simples. Cuántas personas viajan, desde dónde, el tipo de transporte principal que se ha usado para llegar a Málaga, la duración de la estancia en la Costa del Sol y el transporte que se va a usar para desplazarse por este destino. Utilizando el Big Data de Turismo Costa del Sol y tras introducir esos datos, el sistema señala cuántos kilos de CO2 se han emitido a la atmósfera por ese viaje y cuántos árboles harían falta para compensarlo, facilitando la fórmula para que se planten en la provincia de Málaga o en otros proyectos relacionados con el medio ambiente amparados por la ONU. 

El sistema engancha y hemos decidido ver cuánto contaminan 4 personas, que se mueven en avión hacia Málaga, que van a estar una semana alojados en la Costa del Sol y que se van a trasladar unos 400 kilómetros en autobús durante esa semana para ir a distintos lugares. Y hemos seleccionado cinco ciudades de origen: Oslo (Noruega), Berlín (Alemania), Londres (Reino Unido), Barcelona (España) y Estambul (Turquía). 

A mayor distancia, mayor contaminación. ¿Está más lejos Oslo o Estambul? Hay 3.500 kilómetros entre Málaga y Oslo y 3.900 kilómetros entre Málaga y Estambul, por lo que contaminan más los que vienen desde la capital turca. Concretamente 3.554 kilogramos de CO2. Para compensar esa cantidad, generada solo por cuatro turistas, habría que plantar 14 árboles. Si esos cuatro viajeros vienen desde la capital noruega su huella de carbono es de 3.193 kilos, siendo necesario plantar 13 árboles. 

Desde Berlín a Málaga hay 2.800 kilómetros y si se hace el viaje en avión se contamina 2.612 kilos de CO2, por lo que habría que plantar 10 árboles para compensar. Entre Londres y Málaga la emisión de esas cuatro personas que hemos cogido como referencia es de 2.090 kilos de CO2 (8 árboles) y desde Barcelona de 978 kilos de CO2 (4 árboles). 

Viendo estos datos, que entendemos que deben tener una base científica al ser realizados por una institución pública, va a ser imposible no sentir remordimiento cuando se viaje a algún sitio por trabajo, por placer o por cualquier otro motivo. Pero viajar hay que viajar, así que lo importante es ver cómo se pueden compensar esas emisiones de forma que tengamos un planeta lo menos contaminado posible.