Land Rover quiere aplicar la tecnología del coche autónomo a las excursiones por el campo
Jaguar Land Rover se ha propuesto aprovechar la tendencia en el desarrollo del coche autónomo para la conducción fuera del asfalto. Los británicos tienen claro que si la tecnología de conducción autónoma funciona en las grandes autopistas, también puede funcionar en los terrenos más escarpados.
En este caso no se trata de conducción 100% autónoma y sin ninguna intervención del conductor, sino que se busca un desarrollo muy avanzado de los sistemas de asistencia al conductor en conducción todoterreno, de forma que tras el volante todo sea infinitamente más fácil.
La ambición de Jaguar Land Rover tiene como punto álgido el poder manejar convoyes de vehículos por el campo mediante intercomunicación, sabiendo en todo momento por dónde y cómo hay que transitar para superar un determinado obstáculo.
Estas situaciones se manejarán gracias a un complejo software que se servirá de la siguiente generación de sensores y cámaras para conocer e interpretar el entorno por el que transita cada vehículo en cada momento, asegurando el máximo confort, agarre y seguridad a los ocupantes.