Skoda es una de las marcas del Grupo Volkswagen que más crecimiento está experimentando en los últimos tiempos, aupada sobre todo por el lanzamiento de modelos con un gran éxito comercial como la tercera generación de los Octavia y Superb. Además, recientemente se han incorporado modelos con una previsión de ventas muy importante como el SUV Kodiaq.
Sin embargo, hay un punto donde la firma checa aún flaquea respecto a sus rivales y respecto, incluso, a otras marcas del mismo grupo empresarial. Y es que, a diferencia de firmas como Volkswagen o Audi, Skoda no ofrece en ninguno de sus modelos una alternativa híbrida, híbrida enchufable o eléctrica.
Es evidente que la creación de un modelo eléctrico es un proceso caro, costoso para la marca, que a día de hoy aún no va a suponer un retorno de la inversión. Este punto es primordial para marcas como SEAT o Skoda, que si bien actualmente sí son rentables, sus márgenes dentro del Grupo VW aún son algo escasos.
De cualquier manera, está previsto que Skoda comience a ofrecer modelos híbridos -más concretamente híbridos enchufables- a partir de 2019, como respuesta a una creciente demanda de los clientes. Los encargados de estrenar estos sistemas de propulsión dentro de la marca serán los Superb y Kodiaq.
Para ofrecer esta tecnología, Skoda no tendrá que invertir ciertos de millones de euros en desarrollar una planta motriz que se adapte a las características de estos modelos, sino que recurrirá a "las estanterías" del Grupo VW, que actualmente ya cuenta con un esquema motor válido.
Este esquema es el que utilizan modelos como el Audi A3 Sportback, el VW Golf GTE o el Passat GTE, es decir, un propulsor de gasolina 1.4 TSI de 150 CV unido a un motor eléctrico alimentado por una batería de iones de litio con una autonomía aproximada de 50 km en modo eléctrico para ofrecer, cuando trabajan de forma conjunta, 207 CV.
El lanzamiento de estos dos modelos será el primer paso en el proceso de electrificación que dará la marca, que continuará, en 2020, con el lanzamiento de su primer modelo completamente eléctrico. Será un SUV, estará basado en el Kodiaq y ofrecerá una autonomía superior a los 500 km con una recarga.