Dacia, la firma de bajo coste propiedad de Renault, cuenta en la actualidad con una gama muy extensa de vehículos con un precio muy aquilatado y unas cualidades enfocadas más a la cabeza que a conquistar el corazón de los clientes. Vehículos prácticos, con una tecnología más que probada y una gran fiabilidad.
No obstante, con el paso de los años, Dacia ha ido mejorando poco a poco tanto los diseños como las calidades de sus vehículos, siendo ahora más atractivos a ojos de los clientes. Los últimos modelos que han pasado por este proceso de actualización han sido los Lodgy y Dokker, que mejoran su imagen y amplían su equipamiento.
En el terreno estético, ambos modelos reciben una nueva parrilla más atractiva, con molduras cromadas que realzan las formas de la misma. Además, se han actualizado las llantas y tapacubos, que pueden estar terminados en una tonalidad más oscura en las versiones Stepway, de corte más aventurero.
En el interior, los cambios son evidentes sobre todo en el volante, de nuevo diseño, y que incluye mandos para controlar el limitador de velocidad y el control de crucero. Se añaden también algunas molduras cromadas, así como una pieza en color negro brillante que realza las líneas del salpicadero.
Se han redistribuido algunos mandos para resultar más ergonómicos, como los interruptores de los elevalunas eléctricos que por fin, tras años en el salpicadero, pasan a situarse en las puertas. Como opción, Dacia ofrece además una nueva cámara de visión trasera, muy útil para maniobrar con estos vehículos de gran volumen trasero.
Las actualizaciones de ambos modelos ya se pueden encargar en los concesionarios de la marca, aunque las primeras unidades no llegarán hasta abril de este mismo año. Los precios serán similares a los actuales, manteniéndose en una horquilla que arranca en los 10.000€ y que raramente supera los 16.000€.