La guerra a los diésel ya se puede considerar una realidad. Los escándalos por los falseamientos de las emisiones en vehículos diésel han puesto el punto y a parte a este combustible al que poco a poco, administraciones y fabricantes van acorralando. Primero Volkswagen anunció que dejaría de usarlo en un futuro más cercano de lo previsto y ahora se le suma el Grupo Renault, por lo que puede que la realidad sea que aquí comienza el principio del fin. Los primeros que están diciendo adiós al diésel son los turismos de menor tamaño, pero sin duda serán solo los primeros de muchos. Renault empezará este 2017 a suprimir los diésel de sus vehículos más pequeños.
El precedente lo tenemos con el último Renault Twingo, para el que Renault descartó el uso de motores diésel en principio por cuestiones prácticas, ya que no eran viables ni lógicos en un coche pensado para un uso mayoritario en ciudad. Dado que las futuras normativas de emisiones se endurecerán contra este tipo de combustible, el Grupo Renault ante la necesidad de mejorar y crear sistemas de reducción de emisiones más complejos, zanja el tema de raíz. Por lo tanto ante un gasto injustificable en motores diésel poco potentes en coches de pequeño tamaño, adiós diésel.
Durante la presentación de los resultados del Grupo Renault, fue Carlos Ghosn quien comentó que los diésel ya no tendrán sentido en coches pequeños, solo en los más grandes de la gama, llegando a ser solo viables en los SUV grandes y en vehículos de alta gama.