El McLaren 650S está a sólo unos días de conocer oficialmente cómo será su sucesor. Será en Ginebra, lugar que atraerá los próximos días la atención del sector del automóvil a nivel mundial con uno de los principales salones internacionales que se celebran a lo largo del año junto al de París o Detroit. Allí estará presente el 720S, el último deportivo salido del cuartel general de Woking y en el que el constructor británico ha querido plasmar muchas de sus grandes ideas.
La intención de realizar un superdeportivo al uso, sin grandes complicaciones y que busque desde el primer momento el disfrute del conductor, algo que se traduce en soluciones como la instrumentación retráctil, la cual oculta la pantalla digital para únicamente dejar un pequeño visor en el que se reflejan los únicos datos necesarios para exprimir el 720S: tacómetro, velocidad y marcha engranada. Sin más distracciones que la conducción en su máximo exponente.
La primera fotografía filtrada del 720S muestra un diseño continuista, a caballo entre las formas del McLaren P1 -el sistema de puertas es idéntico, en lugar del cierre tradicional que equipa su antecesor- y las dimensiones y prestaciones del 650S. Los responsables de la marca afirman que será dos veces más eficiente aerodinámicamente que este último, algo que unido al incremento de potencia y al nuevo sistema de frenos con discos carbocerámicos, prometen hacerlo más eficiente en circuito y conducción deportiva.
Estéticamente, el alerón escamoteable se ha integrado en el diseño de la zaga, mientras que McLaren ha querido dar continuidad al parabrisas delantero también en el techo, el cual se optado por una superficie acristalada que se une con la luneta trasera y el espacio en el que se encuentra el potente propulsor V8 biturbo de 4.0 litros que es capaz de entregar hasta 720 CV, una cifra que precisamente da el nombre a este nuevo modelo de los de Woking. El gran difusor trasero asegurará que el eje trasero mantenga siempre la suficiente carga aerodinámica para transmitir el máximo de esa potencia al asfalto.
En cuanto al interior, además de la instrumentación retráctil antes mencionada, destaca la consola central flotante, la pantalla de 8 pulgadas y un interior en Alcántara. El McLaren 720S todavía no ha anunciado el resto de cifras prestacionales, pero es de esperar que mejore las que tenía el 650S, tanto en velocidad punta, 333 km/h, como en la capacidad de aceleración. Recordemos que el anterior modelo ya era capaz de hacer el 0 a 100 km/h en apenas tres segundos. Las conoceremos, junto al resto de imágenes del nuevo en el próximo Salón de Ginebra 2017.